Gozo Y Gratitud al Señor Por La Oración Contestada, estos son los sentimientos expresados por el rey David en el Salmo 21

Porque este Salmo es una acción de gracias de David por la victoria recibida en el campo de batalla,

Pero que David reconoce que es una victoria que no tiene nada que ver con su propio poder, sino que en realidad todo se debió a la poderosa mano de Dios.

De modo que encontramos a un David que ha regresado victorioso de la batalla, pero que No está dispuesto a atribuirse el mérito de un solo aspecto de esa victoria.

Antes bien, contemplamos a un David que antes de la batalla suplicó, en el Salmo 20, que Dios lo librara.

Y la respuesta de esa oración se encuentra en el Salmo 21, donde confirma que fue Dios quien lo liberó y le concedió la victoria

Por tanto, David ahora le da a Dios el crédito y la gloria, porque es Dios quien lo salvó, y en respuesta, David honra a Dios y se regocija en esa salvación.

Si usted desea profundizar un poco más sobre la gratitud en el corazón del creyente, por favor visite No Descuides La Gratitud Hacia Dios

Gozo Y Gratitud la Señor Por La Oración Contestada

Cada salvación, cada liberación, cada victoria, cada momento de perseverancia, cada ministerio exitoso, no es fruto de la obra humana

Sino que todo acontecimiento en la vida del hombre de fe, es una respuesta de Dios al clamor y la oración presentada, porque ¡Todo se debe a Dios¡

Y es así como lo establece la Escritura por medio del apóstol Pablo:

2 Corintios 2:14 Mas a Dios gracias, el cual nos lleva siempre en triunfo en Cristo Jesús,

Y por medio de nosotros manifiesta en todo lugar el olor de su conocimiento.

Debemos estar conscientes de todo lo que Cristo ha hecho en la vida de los creyentes, de modo que siempre demos gracias a Dios

Y mantengamos un profundo agradecimiento porque Dios nos hace participar del triunfo de Cristo,

¿Cuál triunfo? El triunfo en la cruz del calvario que nos da la esperanza segura de la ¡Resurrección¡ por lo que No habrá muerte segunda para los que en Él creemos,

Pero con esa gratitud debe venir el compromiso, porque la salvación nos ha sido entregada con el propósito de permitirnos anunciar por todas partes el mensaje del Evangelio

De modo que todos, en todas partes del mundo, reconozcan a Cristo como el único medio de salvación, el único camino al cielo.

Entonces, seamos agradecidos con nuestro Padre, porque los creyentes somos ese instrumento que lleva vida a los que han de creer en Cristo.

  • Gozo y gratitud por el poder de Cristo en nosotros

Romanos 8:37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.

Ninguno creyente puede mirar sus éxitos o victorias en su vida y asumir que estos son fruto de nuestra fuerza o nuestra inteligencia.

Sino que con corazón humilde y agradecido, alzar los ojos al cielo y reconocer todo Dios lo hizo por nosotros y  en nosotros

Pero al mismo tiempo, poder ver todo lo que Dios hace a través de nosotros cuando nos sometemos en obediencia a Su Palabra y ordenanza

  1. Gozo y gratitud porque Dios contesta todas nuestras oraciones.

Salmo 21:1   El rey se alegra en tu poder, oh Jehová;

Y en tu salvación, ¡cómo se goza!

La salvación aquí en este texto, no se refiere necesariamente a la salvación que el Señor nos da al librarnos de la muerte espiritual y la condenación eterna

Sino que hace referencia a la salvación que el Señor obra en la vida de sus hijos, de cualquier situación adversa que se vive en el día a día

Pero que es una liberación que Dios ordena en el Nombre del Hijo, de modo que habla  de cualquier victoria, liberación o demostración de fortaleza de parte de Cristo.

En ese sentido, debe haber un corazón agradecido y gozoso al entender que la presencia del Señor siempre está con nosotros, obrando a nuestro favor.

  • Gozo y gratitud por la manifestación del poder de Dios

Salmo 21:2 Le has concedido el deseo de su corazón,

Y no le negaste la petición de sus labios. Selah

Esta es una Palabra maravillosa pero que muchas veces los creyentes consideramos un “Cheque en blanco” donde Dios está obligado a conceder ¡Todo lo que queramos¡

Pero eso ¡No es así¡ pues no podemos dejar de lado la triste realidad del corazón humano: necio, egocéntrico, pecaminoso y voluntarioso

Es por ello, que en estas Palabras de David no podemos menos que mirar a Cristo y reconocer que Dios siempre responde las oraciones del Hijo.

Es decir, que Dios siempre contesta las oraciones de Su ungido y David se regocija en eso.

Porque nos recuerda que la razón por la que Cristo recibió todas esas bendiciones del Padre es ¡Porque se las ganó¡ En Cristo se encuentran todos los méritos

¿Por qué? Porque Él tuvo una vida sin pecado, de perfecta obediencia y sometimiento absoluta a la Voluntad del Padre

Por tanto, Cristo se ganó el derecho de que Dios contestara todas sus oraciones, se ganó el derecho a todo lo bueno, a la gloria y al honor y se ganó el derecho de la presencia de Dios

Pero en nosotros es diferente, nosotros nos ganamos todas las bendiciones del Padre ¡En los meritos de Cristo¡

Es por ello que nuestra oración, nuestra petición siempre ha de hacerse en el maravilloso Nombre de Cristo, para ser escuchados.

Y si esa petición se encuentra conforme a perfecta y buena Voluntad de Dios para nosotros, será contestada y será de bendición

De lo contrario, todos los deseos del corazón humano, que no están en la Voluntad de Dios, solo pueden traer más dolor, destrucción y muerte a nuestra vida.

  • ¿Dios concede las peticiones de un corazón que duda?

Marcos 9:23-24 Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.

E inmediatamente el padre del muchacho clamó y dijo:

Creo; ayuda mi incredulidad.

Debemos entender que la dificultad nunca está en Dios, sino en el corazón del ser humano,

Es decir, para Dios ¡Todo es posible¡ porque Él es el Omnipotente y sabio Dios, para Él no hay límites, ni dificultades insuperables, Él es Dios de imposibles

Pero para el hombre sí existen ¡Infinidad de limitantes¡ para nosotros existen muchos imposibles

Y es aquí donde podemos apreciar nuestra gran pequeñez delante del Omnipotente Dios, y donde nos hacen eco las maravillosas palabras de Jesús

¡Al que cree todo le es posible¡ porque el problema del hombre se llama “Fe” y es por ello que muchas de nuestras oraciones pareciese que no son escuchadas

El poder de la fe genuina

Pero este padre que está delante del Señor, reconociendo su problema de fe, alza su voz en un gran clamor para decir ¡Si creo pero ayúdame a creer más¡

Por tanto, cuando oremos al Señor, hagámoslo con fe, reconociendo Quién es Dios, y si hay incredulidad, pidamos Su ayuda para poder creer

Y solo entonces, veremos la respuesta de Dios a cada una de nuestras peticiones.

  • ¿Dios concede las peticiones de un corazón egoísta?

Santiago 4:3 Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en vuestros deleites.

No hay diferencia alguna entre la oración de un cristiano y la de un incrédulo, que acude a Dios solo en casos de necesidad, en busca de una respuesta inmediata

Sobre todo, cuando esa oración está centrada solo en peticiones superfluas, temporales, materiales, llenas de humanismo vano, y no en Dios y su gloria.

¿Por qué? Porque el incrédulo, cuando se acuerda de Dios y ora, lo hace solo pensando en lo apremiante de este mundo y su urgente necesidad

Pero a Dios no se le puede buscar como a un “bombero” que de manera inmediata apague nuestros incendios, que lo haga según nuestra urgencia y a nuestra manera

¡No¡ a Dios se le busca con humildad, reconociendo nuestra pequeñez, nuestro pecado, nuestra incapacidad humana

Y se ora al Señor, no para que Él haga nuestra voluntad, sino para que Él nos ayude a poder hacer la Voluntad perfecta del Padre en nosotros,

En ese sentido, nuestras peticiones serán escuchadas solamente si se acompañan de arrepentimiento, de búsqueda de santidad, de una constante comunión con el Señor

Y cuando el propósito de acercarnos a Dios en oración, sea poder vivir de manera tal, que todo lo que hagamos, digamos o pensemos, sea solo para agradarle a Él.

  • Gozo y gratitud y obediencia.

1 Juan 3:22 y cualquiera cosa que pidiéremos la recibiremos de él,

Porque guardamos sus mandamientos, y hacemos las cosas que son agradables delante de él.

No puede haber bendición sin obediencia porque Dios No ha de recompensar aquel que se aleja de la Ley

Por tanto, nuestra oración será escuchada por Dios solamente si ¡Guardamos sus mandamientos! Y hacemos todo lo que Él manda

¿Por qué? Porque la Escritura es nuestra norma de fe y autoridad, en ella esta revelada la Voluntad expresa de Dios para la vida de sus hijos

Y porque en la Escritura encontramos la respuesta a cada una de las situaciones que vivimos, la forma correcta de pensar, actuar y responder

De manera entonces, que la única forma de obtener una respuesta efectiva a nuestro clamor es ¡Conocer la Escritura y hacer lo que ella dice¡

Porque en la Escritura se encuentra el consejo oportuno del Altísimo y sabio Dios que siempre determina para nosotros, aquellas cosas que han de traer verdadera bendición

Por tanto, oremos y obedezcamos todo el consejo de Dios, aún cuando la realidad que nuestros ojos observen, nos diga todo lo contrario.

  • Gozo y gratitud en la voluntad de Dios

1 Juan 5:14-15 Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a su voluntad, él nos oye.

Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que pidamos,

Sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.

Nuestra seguridad siempre se encuentra en Cristo, porque en su vida santa sin pecado y en su obediencia perfecta ¡Nosotros somos escuchados por el Padre¡

Es por ello, que toda oración y ruego, siempre la hemos de hacer en el Nombre de Cristo, y Él en su fidelidad, intercede por nosotros delante del Padre

De manera que todo lo que pidamos se encuentre siempre en la perfecta Voluntad de Dios para nuestra vida

Pues de lo contrario ¡Mejor es que nuestra petición no sea concedida¡ porque el corazón humano nunca sabe lo que es realmente conveniente.

  • Gozo y gratitud en la oración perseverante 

Salmo 55:17 Tarde y mañana y a mediodía oraré y clamaré,

 Y él oirá mi voz.

La perseverancia es vital en nuestra comunión con el Señor, de manera que nuestra oración siempre manifieste nuestra profunda necesidad y dependencia

Es por ello que el salmista dice ¡Tarde, mañana y mediodía clamaremos delante del Señor¡ y tendremos la seguridad que ¡Él nos oirá¡

Por tanto, no nos cansemos de clamar, no nos casemos de buscar al Señor, no nos casemos de esperar ¡Porque la respuesta llegara¡

Solo que, esa respuesta no siempre es la que nosotros quisiéramos escuchar, pero esa respuesta, con toda seguridad, es la que necesitamos para seguir avanzando.

Que el Señor nos conceda un corazón entendido para aceptar su perfecta y buena Voluntad en nuestra vida.

  • Gozo y gratitud por la reconciliación.

Mateo 5:23-24 Por tanto, si traes tu ofrenda al altar, y allí te acuerdas de que tu hermano tiene algo contra ti,

Deja allí tu ofrenda delante del altar, y anda, reconcíliate primero con tu hermano, y entonces ven y presenta tu ofrenda.

Para que nuestra oración sea escuchada es urgente presentarnos delante del Señor con un corazón contrito y humillado

Pero eso solamente es posible si estamos en paz con nuestro prójimo, lo que significa practicar constantemente el arrepentimiento y el perdón

Porque así como ofendemos a Dios, también ofendemos a nuestro hermano, y así como nos ponemos a cuentas con el Señor, es preciso también ponernos a cuentas con el prójimo

Y eso implica, pedir perdón por el daño que causamos a otros, y al mismo tiempo, perdonar la ofensa que recibimos.

Solamente entonces, podremos presentarnos delante del Señor y clamar por nuestra necesidad, con la seguridad que ¡Seremos escuchados¡

  • Gozo y gratitud por la Palabra de Dios

Proverbios 28:9 El que aparta su oído para no oír la ley,

 Su oración también es abominable.

Si queremos que Dios atienda nuestra necesidad, es preciso que nosotros primeramente atendamos la Ley de Dios

Porque, cómo podemos ir al Señor en busca de auxilio sino estamos dispuestos a obedecer lo que establece para que nos vaya bien.

Gozo y gratitud por la oración contestada

Es decir, que no podemos olvidar el propósito de la Ley de Dios: su obediencia trae bendición, nos aparta del mal y nos hace agradables delante de Dios

Por tanto, obedecer los mandamientos divinos nos hace bien, y garantiza el oído atento de Dios ante nuestro clamor ¡Bendita obediencia¡

Pero nunca olvidemos que Dios es soberano en responder nuestras oraciones y que Él No está en deuda con nosotros, no está obligado a respondernos

Y que si lo hace, es por su infinita gracia y misericordia a la vida de su iglesia.

Conclusión

Gozo y gratitud al Señor por la oración contestada, son los sentimientos que deben prevalecer en el corazón del cristiano

Sin olvidar que el auxilio del Señor siempre llega a nosotros como un regalo de la infinita gracia y misericordia inmerecidas.

Y que nuestra mayor alegría siempre ha de estar en reconocer la hermosa presencia del Señor en nuestro caminar que siempre nos da la victoria.