Cristo Nuestra Esperanza De Gloria

Cristo Nuestra Esperanza de Gloria, una esperanza valiosa y necesaria en un mundo cegado por una realidad aplastante

De manera que la esperanza, es una palabra tan necesaria en nuestra vida, sabiendo que desde la caída el mundo ha estado en crisis provocada por el pecado y sus efectos,

Y hoy en día aparte del impacto del pecado, enfrentamos la crisis del virus, de la economía, de la cuarentena, y de que parece que esto nunca va a terminar,

En medio de todo esto, es bueno hacernos la siguiente pregunta ¿Cómo estamos viendo el futuro?

Será que albergamos esperanza o desesperanza. Estamos viendo el futuro con los ojos de la Fe a la luz de la Escritura o simplemente con los ojos humanos,

Para la mayoría de personas la esperanza esta puesta en lo que habrá de venir por medio de alguna persona o de alguna ley que les favorezca

Pero para el pueblo de Dios, la esperanza está puesta en la persona y obra de Jesucristo, tanto presente como futura.

Si usted desea escuchar esta enseñanza, puede visitar https://youtu.be/bhM7YRr_gxE

Pero si desea profundizar sobre el consuelo que solo Cristo nos provee, puede visitar Cristo Es Nuestro Único Consuelo Tanto En La Vida Como En La Muerte

Cristo nuestra esperanza de gloria

Para nosotros,  la Iglesia de Cristo, la esperanza esta puesta primeramente en lo que ya tenemos,

Y ¿qué es lo que tenemos? Tenemos a Cristo en Nosotros, este es nuestro punto de partida, la persona y obra perfecta del Señor a favor de su pueblo

Segundo, nuestra esperanza está puesta en lo que vendrá, la esperanza escatológica de la segunda venida de Cristo,

Haciéndose necesario recordar que, la esperanza del Pueblo de Dios desde la caída, con Adán  y Eva, siempre ha sido escatológica,

Porque los antiguos, dice Hebreos 11, se sostuvieron como viendo al invisible, porque esperaban con ansias la primera venida de Cristo,

Los hombres y mujeres del Antiguo Testamento, esperaban el cumplimiento del anuncio del Evangelio hecho en Génesis 3:15,

Donde la simiente de la mujer, que es Cristo, aplastaría la cabeza de la simiente de la serpiente, que es Satanás.

Y esa esperanza, lleno de gozo a los hijos de Dios, los fortaleció en su fe y los motivó a enfrentar la batalla de la fe, aun en medio de los peores sufrimientos,

Ahora nosotros, los que vivimos en este tiempo, nos sostenemos viendo, primeramente la persona y obra de Cristo, realizada en la cruz del calvario

Pero también vemos hacia adelante, hacia la consumación de los tiempos con la segunda venida gloriosa de Cristo, por su iglesia.

1. Cristo en nosotros, nuestra esperanza de Gloria.

Colosenses 1:27  a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles;

que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria,

La expresión  “Esperanza”, significa, esperar con anhelo, con placer, con gran expectativa, algo glorioso que ha de suceder.

¿Y qué es lo que ha de suceder? La segunda venida de nuestro Señor Jesucristo, en la que veremos su magnificencia, su grandeza

Y esta es una expectativa confiada, certera, que así será, de manera que esperaremos con paciencia y gozo

• Cristo, nuestra única esperanza:

El tema central de la carta a los Colosenses es: “Cristo, el preeminente, el único y el todo suficiente Salvador”,

Así de sencillo, así de absoluto, teniendo claro que ningún ser humano puede aportar algo a la salvación del hombre, ni Buda, ni Confucio, ni Mahoma,

¡Ningún hombre ni ninguna mujer, ni la ciencia, ni el dinero, Solo Cristo en nosotros es nuestra esperanza de gloria,

Y Cristo es, una esperanza firme en la cual debemos tener plena convicción, sin duda alguna, porque es una esperanza que ya la tenemos,

Tal como dice la Escritura  “Cristo en nosotros”.

• ¿Cómo mora Cristo en nosotros?

Romanos 8:11  Y si el Espíritu de aquel que levantó de los muertos a Jesús mora en vosotros,

el que levantó de los muertos a Cristo Jesús vivificará también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros.

Cristo mora en nosotros por medio del Espíritu Santo, el mismo que hizo resucitar a Cristo de entre los muertos, es el mismo que nos da vida a nosotros,

Y es gracias a esta Verdad, que nosotros también, podemos tener la esperanza gloriosa de la resurrección de modo que no hay duda Cristo es un Salvador Completo.

• ¡Cuidado con las herejías¡

Las herejías son medias verdades que pretenden trastocar la Verdad bíblica, de manera que nos hacen creer, que la fe en Cristo no es suficiente para salvación

Y al igual que hoy en día, las herejías en la Iglesia de Colosas decían que “La fe en Cristo, por buena que sea, no es suficiente, porque Cristo no es un Salvador completo”.

Pero el apóstol Pablo rechaza esta enseñanza herética diciendo lo siguiente,

Colosenses 2:10  y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad.

Entonces ¿Cómo estamos, cada uno de los creyentes, en Cristo? Estamos “Completos” la Escritura indica que tenemos todo lo requerido en Cristo.

En Jesucristo  tenemos todo lo que necesitamos para la salvación eterna, y todo lo que necesitamos para vivir esta vida temporal

2. Cristo nuestra esperanza de gloria en el día a día.

Juan 1:16  Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia.

En esa unión vital con Cristo, Él es la fuente inagotable de todas nuestras bendiciones tanto en esta vida como en la plenitud de la vida eterna.

Pero la esperanza cristiana no solo es vida eterna en el cielo, sino también vida nueva y abundante aquí en este mundo transitorio

Por lo tanto, necesitamos afirmar la esperanza cristiana mientras vivimos en el mundo:

• La presencia de Cristo:

Tenemos la esperanza de que Dios estará con nosotros todos los días hasta el fin del mundo,

Mateo 28:20  enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.

Y está es una maravillosa esperanza, porque tenemos la convicción de que no estamos solos, que el Señor no nos ha abandonado,

Que en todo lo que emprendamos, para el avance de su obra, para llevar una vida que glorifique su Nombre, Él siempre estará con nosotros.

• El Evangelio de esperanza:

El evangelio nos sustenta por medio de la esperanza.

Isaías 40:31  pero los que esperan a Jehová tendrán nuevas fuerzas; levantarán alas como las águilas;

correrán, y no se cansarán; caminarán, y no se fatigarán.

Las buenas noticias de Dios nos dan nuevas fuerzas para elevarnos por sobre este mundo caído, y correr y caminar teniendo la Palabra de Dios como fundamento,

De manera que no tropezamos ni desmayamos, porque la Palabra de Dios no nos deja debilitarnos, y nos hace ver más allá de lo que el mundo ve.

Es así, como las buenas nuevas de salvación nos dan tal esperanza, firme y duradera, que nos permiten vivir en este mundo sin cansarnos ni fatigarnos.

• Cristo nuestra esperanza de gloria y su segunda venida:

La fe de la iglesia del Nuevo Testamento está dominada por la expectativa de la segunda venida del Señor.

Cada libro del Nuevo Testamento nos dirige hacia el regreso de Cristo y nos insta a vivir de tal manera que estemos siempre listos para ese glorioso regreso.

Esta es la maravillosa Verdad que se nos dice repetidamente en los Evangelios, enseñándonos que:

El Hijo del Hombre vendrá con sus ángeles en la gloria del Padre

Mateo 16:27  Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles,^(L) y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras.

Cristo anuncia que Él es el gran Yo Soy y que vendría de nuevo:

Marcos 14:62  Y Jesús le dijo: Yo soy; y veréis al Hijo del Hombre sentado a la diestra del poder de Dios, y viniendo en las nubes del cielo.^(K)

Con frecuencia Jesús dijo a sus oyentes que esperaran su regreso, dado que él vendría en una hora inesperada.

Y que por ello, la vida de la iglesia debe ser una vida de vigilancia, haciendo lo que a Dios le agrada

Mateo 24:42  Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor.

También, el Señor habló de la bienaventuranza de aquellos siervos a quienes Él encuentre fieles en su venida:

Lucas 12:37  Bienaventurados aquellos siervos a los cuales su señor, cuando venga, halle velando;

de cierto os digo que se ceñirá, y hará que se sienten a la mesa, y vendrá a servirles.

• ¡!Una iglesia sin esperanza¡¡

Lucas 21:28 «Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza porque vuestra redención está cerca».

La Escritura nos dice, que cuando las señales del fin se acerquen, cuando las situaciones difíciles se intensifiquen en este mundo,

Entonces, deberemos erguir y levantar nuestra cabeza, porque eso significa que el día glorioso, de la segunda venida del Señor, está cerca.

Pero ¿Será que la iglesia del Señor ha perdida esta maravillosa expectativa? ¿Será que la iglesia está viviendo sin la gloria esperanza de la segunda venida?

Y si esto es así, es porque la iglesia del Señor está viviendo como si perteneciera a este mundo, llena de afanes y prioridades seculares,

Olvidando la plenitud de vida que se encuentra en la expectativa de la segunda venida del Señor, creyendo que no es verdad, que es simbólica, o que está muy lejana

Y es así como muchos creyentes se han dedicado a una vida de mundo, desordenada y vacía, sin esperanza firme

Pero, aunque tengamos diferencias escatológicas, siempre debemos tener la seguridad de que Cristo vendrá por su iglesia, y vivamos con esa hermosa expectativa

Y si esta expectativa ya no está presente en la iglesia del Señor, entonces, hay algo que está radicalmente mal, en los corazones de los creyentes

3. Cristo nuestra esperanza de gloria y su segunda venida

¿De qué manera nos alienta la esperanza firme de la segunda venida de Cristo?

Pensar que la segunda venida del Señor se acerca, no debe ser motivo de miedo o incertidumbre,

Esos sentimientos pueden ser genuinos para los que aún no tienen a Cristo en su corazón, porque en su segunda venida, el Señor viene como Rey y hará juicio al mundo

Pero para los creyentes, esa Verdad debe ser motivo de gozo, porque sabremos que el Señor viene por nosotros, para vivir eternamente con Él

• En el sufrimiento nos consuela saber que Cristo vendrá por su Iglesia.

Apocalipsis 1:9  Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo,

 estaba en la isla llamada Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo.

En este Libro de Apocalipsis, el apóstol Juan nos habla como nuestro hermano, que participa de nuestro sufrimiento y aflicción

Y este es un sufrimiento por causa de la predicación de la Palabra de Dios y por el testimonio de Jesucristo, que siempre traerá persecución y hasta martirio al creyente,

Pero también nos habla de los sufrimientos que vienen a nuestra vida a causa de los desastres naturales, pandemias, guerras,

Y aún, el sufrimiento que experimentamos como fruto del propio rechazo familiar por no creer, pensar y actuar igual que los demás.

Ahora bien, no podemos ignorar que hay una gran diferencia entre el sufrimiento cristiano y el del incrédulo,

Porque para los cristianos, el sufrimiento tiene propósito santo, purifica la fe, da madures de carácter y nos brinda la oportunidad de glorificar a Dios

En cambio, para el incrédulo el sufrimiento lo lleva a blasfemar de Cristo y aun con la tragedia sobre sus hombros, no se arrepienten.

Así que, tener conciencia clara y firme convicción de la segunda venida del Señor, nos consuela ante la vivencia de la tragedia humana.

• Alienta a la Iglesia a Perseverar.

Apocalipsis 2:3  y has sufrido, y has tenido paciencia, y has trabajado arduamente por amor de mi nombre, y no has desmayado.

Cuando ponemos nuestros ojos en la segunda venida del Señor, podemos llenarnos de paciencia, porque sabemos que Cristo vendrá por su iglesia,

Y tendremos la convicción que el Señor nos hará prevalecer, que no desmayaremos, porque hemos nacido de nuevo y tenemos el poder el Espíritu Santo en nosotros.

Además, tenemos a todos nuestros hermanos en la fe, que nos ayudamos unos a otros, y perseveramos por amor al Nombre de Cristo

• Fortalece y motiva a la Iglesia a dar testimonio de Cristo.

Apocalipsis 1:20  El misterio de las siete estrellas que has visto en mi diestra, y de los siete candeleros de oro:

las siete estrellas son los ángeles de las siete iglesias, y los siete candeleros que has visto, son las siete iglesias.

Las iglesias están representadas como un candelero, que brillan, que dan luz, pero no con luz propia sino con la luz de Jesús,

Esto significa que la iglesia está llamada a dar testimonio de Cristo, está mandada a evangelizar, a cumplir con la gran comisión.

Y esto lo hacemos por medio de nuestro testimonio de vida, una vida nueva y transformada que permite al incrédulo, creer en la obra perfecta y completa de Cristo

4. Cristo nuestra esperanza de gloria y la honra a Dios

La segunda venida de Cristo anima a la iglesia a dar gloria a Dios.

Apocalipsis 1:5-6  y de Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los reyes de la tierra.^(C)

Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su sangre,

 y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre;^(D) a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.

Debemos aprender a dar gloria a Dios cada día de nuestra vida, en cada circunstancia vivida, y ¿Cómo lo hacemos?

Damos gloria al Señor de tres maneras: reconociendo lo que Dios es, contemplando su obra maravillosa y llevando una vida de obediencia a sus mandamientos.

• Damos gloria a Dios primeramente por lo que El es:

Antes de admirarnos por la obra del Señor, es primordial que reconozcamos primero, Quién es Dios, que conozcamos su maravillosa Persona

Y lo podemos conocer por medio de Jesucristo, así que nos preguntamos ¿Quién es Jesucristo?

Jesucristo es el testigo fiel, quien cumplió perfectamente la Voluntad del Padre. Él es el primogénito de los muertos, porque resucitó, venció al pecado y a la muerte.

Pero también, Jesucristo es el soberano de los reyes de la tierra: El es Rey por sobre todo, Cristo gobierna al mundo y nuestra vida.

• Damos gloria a Dios por lo que ha hecho por nosotros.

¿Qué ha hecho Dios por nosotros? La Escritura dice que ¡Nos amo¡ y esto no es pasado, sino que Nos amo desde la eternidad, nos ama hoy, y mañana y por toda la eternidad.

Además, el Señor nos lavo de nuestros pecados con su sangre: Se sacrifico por nosotros, porque solo su sangre pura y santa, podía lavarnos del pecado.

Y no solo eso, sino que también nos hizo reyes y sacerdotes para Dios: Nos hizo nuevas personas, y nos dio dos nuevos oficios, para que vivamos diferente al mundo.

• Damos gloria a Dios por medio de una vida de obediencia:

Pero una obediencia gozosa, sabiendo que Cristo viene pronto:

Apocalipsis 1:7  He aquí que viene con las nubes,^(E) y todo ojo le verá, y los que le traspasaron;^(F)

 y todos los linajes de la tierra harán lamentación por él.^(G) Sí, amén.

En su primera venida, el Señor estuvo entre nosotros como siervo, entregando su vida para salvación nuestra

Pero en su segunda venida, Cristo vendrá como Rey, y todo aquel que no le conoce, lo lamentará, porque el Rey emitirá su juicio justo y santo

Y la iglesia se gozará porque verá la plenitud de Cristo en su pueblo.

Conclusión.

Cristo vendrá por su iglesia.

Apocalipsis 22:20-21  El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús.

La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. Amén.

Y ante esa glorioso “Amén de Dios”  que significa “Así es y así será”, lo único que podemos decir nosotros es “Amén”, que significa, “Así sea”

Porque la gracia de Cristo es con nosotros, y nos capacita para mantenernos en fe, para esperar pacientemente, y deleitarnos en la expectativa de su segunda venida.