¿qué quieres que te haga? es una pregunta que surge como una respuesta. 

El clamor que se acompaña de adoración,  podrá escuchar la expresión hermosa del Señor, diciendo: ¿Qué quieres que te haga? 

Marcos 10:50-51 “El entonces, arrojando su capa, se levantó y vino a Jesús. Respondiendo Jesús, le dijo:

¿Qué quieres que te haga? Y el ciego le dijo: Maestro, que recobre la vista.

¿Qué quieres que te haga?

Esta es una narración bíblica muy hermosa, en la que se nos permite conocer a Bartimeo, un ciego que goza de la misericordia del Señor,

y no solo en el sentimiento de Jesús al ver su condición de miseria humana,

sino, en la acción misma del Hijo de Dios, obrando en la vida de este hombre.

¿qué quieres que te haga?

Sabemos que está es la pregunta maravillosa que el Señor le hace al ciego Bartimeo.

Podemos describir a Barimeo, como una persona que en él mismo se encuentra representada la condición de la persona humana sin Cristo.

La Palabra nos cuenta, que  Bartimeo era ciego, hijo de Timeo, que se encontraba sentado junto al camino,

Además, que mendigaba y que daba voces cuando supo que Jesús mismo pasaba por allí;

así gritaba “¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!

Con toda esta información podemos establecer lo siguiente:

  1. ¿qué quieres que te haga? una pregunta que refleja la condición humana

No hay duda que la condición de Bartimeo refleja la miseria humana.

En Marcos 10:46  encontramos que el Señor Jesús salía de Jericó junto con sus discípulos, y le seguía una gran multitud,

y que junto al camino se encontraba Bartimeo el ciego, hijo de Timeo, y que  mendigaba.

  • Era ciego

Cuando la Palabra nos dice que era ciego, podemos nosotros comprender que así nacemos todos.

Debido al pecado heredado de Adán todos nacemos espiritualmente ciegos,

no podemos ver las maravillas de Dios en Cristo.

Aun en su tremenda calamidad física, material y espiritual, el hombre está incapacitado de buscar a Dios.

Podrá reconocer su propia miseria, y podrá comprender que existe  Dios, pero no podrá buscarle ni acercarse a Él.

  • Hombre imperfecto

Cuando nos dice que era hijo de Timeo, nos está refiriendo que todos nacemos como hijos de hombre,

Nacemos imperfectos, inclinados a la maldad, pues el pecado se impregna en el corazón y se perfecciona en la medida que el hombre crece

A medida que nos vamos incorporando al mundo, nos vamos contaminando con el pecado y sus deleites temporales y aparentes,

y vamos viviendo conforme a las exigencias de nuestra propia naturaleza egocéntrica.

  • Estaba sentado junto al camino

El relato bíblico nos aclara que Bartimeo estaba sentado junto al camino.

Con este hecho podemos inferir, lógicamente, que no estaba en el camino. Es decir, sabia de Jesús pero no le conocía.

Como muchos de nosotros, que decimos saber que Dios existe, que Él es bueno y que gracias a Él ellos tienen vida,

pero no quieren saber nada de iglesias, ni de congregarse, ni de servir a Dios.

Esto quiere decir, que saben que Dios existe, pero no le conocen, ni pueden entablar una relación personal con el Señor.

Y no pueden porque su dios son ellos mismos y sus propias necesidades egocéntricas.

  • Era pobre materialmente

Su condición material era de mucha escasez. Vivía de la misericordia de los hombres, que por naturaleza son malos.

Necesitaba una bendición material, pero era más grande su necesidad espiritual.

  • Gritaba

Daba voces diciendo: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!

Esto nos deja ver que él conocía que Jesús era el Mesías prometido, el que vendría del linaje de David.

Y en su primera petición, él pide “Misericordia”, no demanda ser sanado.

Conocía perfectamente su condición delante del Señor, que era mucho más dura que su misma condición física y material.

Él necesitaba gozar del favor divino. 

  1. ¿qué quieres que te haga? La respuesta del Señor, ante el clamor

Marcos 10:49”Entonces Jesús, deteniéndose, mandó llamarle; y llamaron al ciego, diciéndole:

Ten confianza; levántate, te llama.

  • El Señor se detuvo.

En medio de la multitud, Jesús se enfoca en el necesitado, un mendigo y ciego, tal vez una carga para los demás,

pero que clama a Él en su necesidad, tal como lo expresa el salmista:

Salmo 34:17-19 “Claman los justos, y Jehová oye,  Y los libra de todas sus angustias.

Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón;  Y salva a los contritos de espíritu.

Muchas  son las aflicciones del justo,  Pero de todas ellas le librará Jehová.”

Un clamor que trasciende lo creado y llega hasta el Creador, Rey y Señor.

Es un grito en forma de clamor que se acompaña de adoración al reconocer Quién era el que se acercaba.

Y es un clamor que primero exalta al dador de la vida, al Creador de los cielos y la tierra, al Dios Omnipotente, para luego pedir.

  • Mando a llamarle

Como respuesta al clamor del ciego, en medio de tanta multitud, Jesús manda a llamarle,

y como muy bien lo declaran los que lo llamaran, ese llamado era de esperanza, de fe, de confianza:

el Señor le había escuchado, el Señor le había visto, y ahora el Señor le permitía acercarse a Él

De manera entonces, que ese llamado contenía tres aspectos fundamentales para la fe cristiana, y que no debemos olvidar:

  • Ten confianza:

Si hemos clamado al Señor, independientemente de la necesidad que nos movió al clamor,

debemos tener la confianza de que Él nos escuchará, y nos responderá.

  • Levántate:

Con la confianza de que nuestro clamor ha trascendido lo creado, y ha llegado hasta el Altísimo,

debemos levantarnos, con fortaleza, y hacer lo que debamos hacer para mantenernos en el camino de la fe.

  • Te llama:

Cuando el Señor nos llama, no hay forma de que se nos impida llegar a Él.

Si Él nos llama, iremos, atraídos por lazos de amor que nos llevarán a Sus pies, el lugar de nuestra seguridad, nuestro refugio y fortaleza,

Llegaremos al lugar dónde podremos rendirnos, depositar nuestras cargas, y ser fortalecidos y renovados en Su amor. 

  1. ¿qué quieres que te haga? Cómo respondemos a esa pregunta

Veamos la respuesta de Bartimeo, cuando su clamor es escuchado.

Marcos 10:50  «El entonces, arrojando su capa, se levantó y vino a Jesús.»

¿Qué es una Capa?

Era su colcha, utilizada muchas veces como almohada, toalla, abrigo y paño de lágrimas.

Esa capa era lo más valioso que él tenía; era su prenda de vestir externa, tal vez rota y seguramente muy sucia.

Eso nos recuerda la vestimenta del hombre en su estado natural.

  • Vestidos por el Señor

Sin Cristo el hombre esta vestido de ropas de inmundicia, esta vestido de hojas de huerta, y su desnudez es vergüenza que le recuerda su pecado.

Hemos de ser vestidos por pieles, como Adán y Eva, una piel que significa muerte, sacrificio, sangre.

Somos vestidos con la sangre preciosa de Cristo, quien cubre nuestra desnudez,

Es el sacrificio de Cristo el que quita nuestra culpa y limpia nuestro caminar.

La pregunta que Jesús le hace luego que él le clama, demanda un ejercicio de fe de parte de Bartimeo:

Marcos 10:51” Respondiendo Jesús, le dijo:

¿Qué quieres que te haga?

Y el ciego le dijo: Maestro, que recobre la vista.” 

¿Cuál es tu respuesta ante un "qué quieres que te haga"?

  • ¿En que se fundamentaba la petición de Bartimeo?

En la fe, la fe es por el oír, y el oír por la Palabra de Dios.

¿Qué había oído Bartimeo? que Cristo es el Mesías, el Hijo de David, Él que había de venir. 

Marcos 10:52 “Y Jesús le dijo: Vete, tu fe te ha salvado.

Y en seguida recobró la vista, y seguía a Jesús en el camino.”

Es hermoso cuando analizamos la palabra “Vete” que pronuncia el Señor.

Con esta palabra Jesús le está diciendo a Bartimeo: Eres libre de tu condición de vida actual.

  • El verdadero milagro para Bartimeo:

El Señor Jesús dice «Eres libre de tu condición de miseria física y espiritual»

Y es entonces cuando, «enseguida Bartimeo recobro la vista». El milagro físico precede al milagro espiritual.

Primero:

El Señor le da un corazón nuevo para creer y ser salvo, un corazón que puede acercarse a Dios y obedecerle,

Segundo:

Una vez obrado el milagro espiritual, Jesús obra el milagro físico: le da la vista.

Y es entonces, cuando deja de estar “junto al camino”, para «entrar al camino», para «caminar en el camino”, que es Cristo Jesús.

Este es el verdadero y maravilloso milagro que obra Cristo en nosotros, sacarnos del camino de perdición y traernos a la luz y Verdad.

  1. ¿qué quieres que te haga? Jesús lo convierte en un discípulo 

Jesús convierte al ciego Bartimeo en un discípulo de Cristo,

y este hecho es fruto del clamor que se acompaña de una adoración genuina.

Lucas 18:43  «Y luego vio, y le seguía, glorificando a Dios;

y todo el pueblo, cuando vio aquello, dio alabanza a Dios 

Pero entonces, vale la pena preguntarnos, en esencia,

  • ¿Cómo se expresa el gran milagro que Jesús hizo en Bartimeo?

Y podemos responder diciendo: Lo hizo un discípulo del Rey de Reyes y Señor de Señores,

Bartimeo fue añadido al cuerpo de Cristo, a la iglesia peregrina que avanza con paso lento pero seguro a la consumación de los tiempos finales,

pero mientras avanza muestra la gloria de Dios en ellos.

  • ¿De qué manera muestra Jesús su gloria?

Ciegos que ahora ven, paralíticos que hoy caminan, sordos que ahora pueden oír y escuchar;

endemoniados que ahora son libres y le pueden proclamar a Él; enfermos que sanan;

La gloria de Cristo se muestra con hombres y mujeres, que han nacido de nuevo, y ahora pueden creer,

Una nueva creación que ahora puede acercarse a Dios Padre y clamar ¡Abba Padre!

Jesús muestra su gloria llevando cautiva  para sí una cautividad, que antes era cautiva del pecado y del mundo,

y que ahora es su pueblo elegido, su iglesia.

El propósito de Marcos es indicar que “el Hijo de David” no es meramente un descendiente de David; 

El Hijo de David !es el Señor de David¡ En realidad es “el Hijo de Dios”.

Por tanto, todos deben seguirle como lo hizo Bartimeo, que le siguió “en el camino”,

el camino mismo que condujo al Maestro al Calvario. Pero la cruz conduce a la corona. Conduce al cielo.[1] 

  • ¿Cómo clamará la iglesia del Señor?

Así nosotros podemos clamar también y decir Señor ten misericordia de:

Mis hijos:

Convierte a mi hijo, a mi hija, Sácale de camino de pecadores, de camino de perdición y que te conozca a ti. Dale un corazón nuevo.

Mi pan diario:

Ten misericordia Señor, y responde a mi condición económica. Aferrarnos a la promesa del «pan de cada día dánoslo hoy»

De mi enfermedad:

Esta enfermedad crónica, terminal, agobiante.

De la condición de mi matrimonio:

Restaura mi matrimonio, levanta nuestra cabeza,

ayúdanos a dar testimonio de tu grandeza sosteniendo un matrimonio que refleje el amor de Cristo por su iglesia.

De mi vida sin sentido, etc.  

Cuál es la respuesta ante un ¿Qué quieres que te haga?

  1. ¿que quieres que te haga?  !Señor hazme un siervo para tu gloria¡

Tu clamor y el mío debería ser; !Señor hazme un siervo para tu gloria¡

Marcos 10:43-45” Pero no será así entre vosotros sino que el que quiera hacerse grande entre vosotros será vuestro servidor,

y el que de vosotros quiera ser el primero, será siervo de todos.

Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido,

sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos.” 

Aprendamos a orar al Señor, aprendamos a clamar identificando cuál es nuestra verdadera necesidad y que el Señor nos libre de pedir:

  • Señorío sobre los demás.
  • Solamente Pedir sin adorar
  • Y buscar ser exaltado

¡¡Que toda la Gloria sea para Dios!!.

 

 

[1] Comentario al evangelio de San Marcos, WillianHendriksen, pág. 311.