¿Dar Para La Obra De Dios? Sí¡ porque “Todo es tuyo y de lo recibido de tu mano te damos1 Crónicas 29:14

Hablemos de mayordomía financiera

¿Qué es un Mayordomo?

Significa “administradores” y el término proviene del griego oikonomos (oikos , casa; nomos , ley)

Literalmente, un mayordomo es alguien que gobierna una casa, un administrador, un mayordomo,

Nosotros somos mayordomos de Dios, Él es el dueño de todo y en Su gracia nos ha confiado Su obra para que la administremos eficientemente para Su gloria.

¿Qué es una Ofrenda?

Es todo lo que le damos a Dios, e incluye recursos, tiempo, dinero, dones, sacrificio como un acto de lealtad, adoración o devoción.

Representa una promesa de lealtad entre el donante y el receptor. Puede tomar la forma de un sacrificio, diezmo, primicias o dinero.

Por ello la mayordomía consiste en administrar bien todo lo que hemos recibido de Dios, lo espiritual y lo material, la vida, los dones y talentos,

A continuación algunas áreas en las que debemos a aprender a ser buenos mayordomos.

  • Familia.
  • Finanzas.
  • Salud.
  • Sexualidad.
  • Emociones.
  • Matrimonio.
  • Ministerio.

Esto significa, que tenemos muchas áreas en las cuales ser buenos administradores, y entonces nos preguntamos:

¿Por qué necesito ser buen mayordomo?

Porque venimos de un estado caído, de un desorden existencial y vivencial total, en el cual hemos creado un caos que necesitamos restaurar

De manera que la buena mayordomía vendrá a ser el resultado de la madurez de un individuo,

Y esa madurez es la capacidad que Dios nos da  para enfrentar la vida y manejar en forma responsable y fructífera toda su bendición, material  y espiritual.

Si desea profundizar sobre cómo ser un administrador eficaz de los bienes de Dios, visite Principios Para Ser Un Siervo Eficaz De Cristo

¿Por qué debemos dar para la obra de Dios?

La mayordomía financiera, para el cristiano, parte de que todo lo que somos y lo que tenemos le pertenece a Dios,

Que nada es nuestro, sino que nosotros, solo somos administradores de los bienes que Dios ha puesto en nuestras manos.

  1. Debemos dar para  edificar la obra  Dios

1 Crónicas 29:1  Después dijo el rey David a toda la asamblea: Solamente a Salomón mi hijo ha elegido Dios; él es joven y tierno de edad,

 y la obra grande; porque la casa no es para hombre, sino para Jehová Dios.

El rey David parte de dos grandes realidades: la obra de Dios es grande y necesita del apoyo de todos para edificarla,

Y que toda edificación que se haga, no es para hombre alguno, sino, solo para Dios.

Eso nos indica, que la acción de dar, está centrado en Dios y su obra. No damos poniendo nuestros ojos en el hombre o en el mundo

  • ¿Necesita Dios que le demos ofrenda?

¡No¡ Dios no necesita de nuestras ofrendas

Entonces, ¿Qué no puede Dios edificar su casa Él solo? Si!¡ Dios puede hacer todo cuanto Él desea, dónde Él desea y con quién Él desea. Y ¿Entonces?

Debemos saber que Dios dejo establecido en su Voluntad soberana que es Su iglesia la que debe sostener a Su iglesia, que la edificación de la obra de Dios es de todos.

Dar para la obra de Dios porque Él nos da ejemplo

Y sepamos, que Dios nunca nos manda  hacer algo que Él no haya hecho ya. Dios es el ejemplo más grande de amor, de dar porque Él lo dio todo.

2 Corintios 8:9  Porque ya conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor a vosotros se hizo pobre, siendo rico,

para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos.

Aquí está descrito el corazón del Evangelio. Aquí está el sustento, la base sobre la cual se levanta la teología cristiana.

Esta es la gloriosa Verdad que transforma no solo la historia humana, sino a la misma humanidad conforme Dios efectúa su intención divina.

Juan 3:16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito,

para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

Y si esa maravillosa Verdad no basta, hay que saber que Dios nos ha dado todo lo que tenemos, Él es el dueño de todo

y nosotros, solo somos los mayordomos de las riquezas divinas, de manera, que si algo se requiere de nosotros, eso es fidelidad.

  1. Debemos ser ejemplo en dar para la obra de Dios

Y el ejemplo comienza en el “Yo”. Cada uno, de manera personal, debe ser testimonio en el dar para la obra del Señor.

1 Crónicas 29:2 Yo con todas mis fuerzas he preparado para la casa de mi Dios, oro para las cosas de oro,

plata para las cosas de plata, bronce para las de bronce, hierro para las de hierro, y madera para las de madera;

y piedras de ónice, piedras preciosas, piedras negras, piedras de diversos colores, y toda clase de piedras preciosas, y piedras de mármol en abundancia.(A)

Dice David “Yo con todas mis fuerzas”, es decir, que con mucho sacrificio pudo reunir todo lo necesario para edificar la casa de Dios

Y empezó ofrendando ¡Oro¡ es decir, lo mejor que se tiene, solo para la casa de Dios

  • Dar para la obra de Dios, nuestras capacidades innatas

Cuando David habla de “Fuerzas” nos está refiriendo a las «capacidades» innatas, esas capacidades con las que nacemos, que son propias de nosotros

Y son esas capacidades y el desarrollo de dones especiales y las manifestaciones de «fortaleza» las que a menudo conducen a la prosperidad y a las riquezas.

Una prosperidad que debe verse reflejada en el amor a la obra del Señor, y no solo para beneficio personal y egoísta

  • Dar para la obra de Dios por amor a Él

1 Crónicas 29:3 Además de esto, por cuanto tengo mi afecto en la casa de mi Dios, yo guardo en mi tesoro particular oro y plata que,

 además de todas las cosas que he preparado para la casa del santuario, he dado para la casa de mi Dios:

David es un maravilloso ejemplo de siervo dador, porque no dio para la casa del Señor, solo lo que el pueblo ofrendaba,

Pues eso habría sido fácil, sino que también ofrendo de su tesoro particular, de lo que era de Él, de lo que a David le costaba

¿Por qué hizo esto David? Porque tenía mi afecto en la casa de mi Dios, porque David amaba la casa de su Dios

David encontraba su contentamiento, su gozo en la casa de su Dios, el corazón de David se encontraba en la casa del Señor

Y por eso ofrendo de lo mejor que él tenía: ¡oro¡ y no de lo que le sobraba, o lo que no hacía falta o lo que ya no quería.

Eso significa que el amor por Dios y su obra: Nos lleva a dar, y dar lo mejor. David dio oro, plata, lo mejor que él podía dar a Dios.

Mateo  6:21 Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.

  1. Los líderes deben ser ejemplo en dar para la obra de Dios

1 Crónicas 29:6-7 Entonces los jefes de familia, y los príncipes de las tribus de Israel, jefes de millares y de centenas,

con los administradores de la hacienda del rey, ofrecieron voluntariamente.

 Y dieron para el servicio de la casa de Dios cinco mil talentos y diez mil dracmas de oro, diez mil talentos de plata,

dieciocho mil talentos de bronce, y cinco mil talentos de hierro.

El Liderazgo va de la mano con el dar, ¿Qué debemos dar como líderes de la obra del Señor? Más tiempo, más recursos, y servicio,

Y todo eso que damos debe ser VOLUNTARIAMENTE. Dios demanda nuestra entrega, pero debe ser voluntaria,

Aprendamos a dar, voluntariamente

Todo servicio que demos para la obra debe ser fruto de la convicción, de la gratitud de lo que Dios ha hecho en nuestra vida.

Lucas 12:48  Mas el que sin conocerla hizo cosas dignas de azotes, será azotado poco;

porque a todo aquel a quien se haya dado mucho, mucho se le demandará; y al que mucho se le haya confiado, más se le pedirá.

  1. Todos estamos llamados a dar para la obra de Dios

Y el llamado es a que Todos demos de lo que tenemos, no lo que nos sobra, de lo que ya no nos es útil,

1 Crónicas 29:8 Y todo el que tenía piedras preciosas las dio para el tesoro de la casa de Jehová, en mano de Jehielgersonita.

La obra del Señor es responsabilidad de todo el pueblo, no solo del pastor y de los líderes, sino que todos estamos llamados a trabajar por el reino.

  1. Dar para la obra de Dios produce gozo

Y la alegría se manifiesta cuando contribuimos voluntariamente y de todo corazón para que la obra del Señor se realice

1 Crónicas 29:9  Y se alegró el pueblo por haber contribuido voluntariamente; porque de todo corazón ofrecieron a Jehová voluntariamente.

Es increíble como a lo largo del texto, la palabra “voluntariamente” se repite insistentemente,

El Señor se goza cuando ve un corazón alegre, dispuesto a dar, No por obligación ni como un pacto para que Dios nos devuelva más

Sino que, por gratitud, como un acto de adoración, de entrega y rendición, damos de todo corazón y voluntariamente

Y el gozo se produce, cuando esa acción de dar se hace con esas dos características: de todo corazón y voluntariamente

  • El gozo de dar produce alabanza

1 Crónicas 29:10  Asimismo se alegró mucho el rey David, y bendijo a Jehová delante de toda la congregación;

 y dijo David: Bendito seas tú, oh Jehová, Dios de Israel nuestro padre, desde el siglo y hasta el siglo.

El rey David, como gobernante del pueblo, se regocijó al ver la entrega y la libertad con que dieron para la casa de Dios

¿Por qué tanto gozo y alabanza? Porque no hay mayor alegría que Dios nos haya hecho participes de su proyecto y plan eterno.

Y esta oración de David, pone la ofrenda al Señor, en su verdadero significado: Dar es adorar y adorar es dar

Si de verdad somos adoradores del Dios Eterno, entonces damos de todo corazón para su obra,

y cuando damos, estamos adorando al Dios infinito, que Todo lo tiene, y que se complace de poner en nuestras manos, de Su riqueza

Dar para la obra de Dios es un acto de adoración

Conclusión:

Dar para la obra de Dios es comprender que todo es de Dios, que lo que tenemos y lo que somos es por el amor de Dios

Y cuando damos, nuestro corazón se llena de gozo, de alabanza y adoración,  porque no hay alegría mayor en el cristiano que saberse participe del plan eterno de Dios

 

 

 

[1]Wendland, P. O. (2002). 1 Crónicas.(L. E. Albrecht & J. C. Jeske, Eds.)(p. 296). Milwaukee, WI: Editorial Northwestern.