Agradecidos Con Dios Por La Iglesia, que existe y es sostenida por su gracia, misericordia y fidelidad a través de Su Palabra

Esto es lo que nos enseña el apóstol Pablo, que estando en prisión les escribe una carta a los hermanos filipenses, cuyo tema central es el gozo en el Señor,

Porque ese gozo Dios nos lo da, aun en medio de los peores sufrimientos que podamos vivir, a causa del Evangelio.

Es por ello que la Escritura nos enseña a estar agradecidos con Dios por nuestros hermanos de la fe, por nuestra iglesia, que es sostenida por el poder de su Palabra.

Porque a pesar que la iglesia está formada por hombres y mujeres llenos de debilidades y desafíos

Aún así, todos los miembros de la iglesia podemos estar llenos de confianza porque nuestra esperanza está puesta en Jesucristo

De modo que al igual que Pablo, podemos  estar convencidos que la buena obra que Jesús comenzó en nosotros, continuará hasta que llegue a su término.[1]

Si usted desea profundizar un poco más sobre el amor a la iglesia, por favor visite Cristo Anima A Su Iglesia A Soportar El Sufrimiento Y Perseverar

Agradecidos Con Dios Por La Iglesia

Agradecer a Dios por poder tener una iglesia donde congregarnos y donde crecer, comienza con una oración de agradecimiento por nuestros hermanos.

Filipenses 1:3-4 Doy gracias a mi Dios siempre que me acuerdo de vosotros,

Siempre en todas mis oraciones rogando con gozo por todos vosotros,

Pablo nos enseña que la verdadera gratitud se encuentra en la necesidad urgente de orar por nuestros hermanos de la fe

Y sintiendo gozo por conocer a cada una de las personas que forman parte de nuestra familia espiritual

Aunque ese conocimiento de nuestros hermanos de fe en ningún momento se convierte en la seguridad o confianza que ponemos en la iglesia

De ninguna manera, sino que nuestra confianza de que la iglesia continuara y se preservará se encuentra en Quien  compró esa iglesia ¡Jesucristo¡

  1. Agradecidos Con Dios Por La Iglesia desde sus comienzos

Siempre es bueno preguntarnos ¿Cómo comenzó esta iglesia? ¿Cuáles fueron sus inicios?

Porque con ese conocimiento podemos comprender cuán grande es la misericordia y la gracia divina.

  • Agradecidos Con Dios Por La Iglesia, a quien Cristo da un nuevo corazón

Hechos 16:13-14 Y un día de reposo[a] salimos fuera de la puerta, junto al río, donde solía hacerse la oración;

Y sentándonos, hablamos a las mujeres que se habían reunido.

Entonces una mujer llamada Lidia, vendedora de púrpura, de la ciudad de Tiatira, que adoraba a Dios, estaba oyendo;

Y el Señor abrió el corazón de ella para que estuviese atenta a lo que Pablo decía.

Esta iglesia de Filipos comienza con una mujer vendedora de purpura,  un producto caro y muy demandado en esos tiempos

Y aunque esta mujer, Lidia, era temerosa de Dios, es decir, había oído hablar de Dios, sabía que Dios existía,

Pero aún no conocía a Jesucristo y no podía creer en Él como Señor y Salvador ¿Por qué?

Porque nadie viene a Cristo sin que Dios abra su corazón, y Dios hizo eso por Lidia y por cada uno de los que llegamos a creer.

Por tanto, la iglesia del Señor comienza con todos aquellos a quienes Dios da un nuevo corazón para poder creer

Y con ese nuevo corazón, ahora ya es posible oír la voz de Dios, entender la Verdad de la Palabra y reconocer la grandeza de nuestro pecado

De suerte tal, que con la obra del nuevo nacimiento ya podemos venir a Cristo y recibirle como nuestro único y solo Salvador.

  • Agradecidos Con Dios Por La Iglesia, a quien Cristo liberta

Hechos 16:27-28 Despertando el carcelero, y viendo abiertas las puertas de la cárcel,

Sacó la espada y se iba a matar, pensando que los presos habían huido.

Mas Pablo clamó a gran voz, diciendo: No te hagas ningún mal, pues todos estamos aquí.

La iglesia de Filipos, al igual que nuestra iglesia actual, comienza con un hombre que quiere quitarse la vida

¿Por qué? Porque este hombre considera que no posee capacidad para hacer frente a una realidad amenazadora

Pero es entonces cuando aparece la mano soberana de Dios, obrando de maneras que no podemos imaginar

Hechos 16:29-31 El entonces, pidiendo luz, se precipitó adentro, y temblando, se postró a los pies de Pablo y de Silas;

Y sacándolos, les dijo: Señores, ¿qué debo hacer para ser salvo?

Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.

¿Cómo fue salvo el carcelero de Filipos? Para rescatar a este hombre de las garras de Satanás y del pecado, Dios tuvo que enviar un terremoto

Y gracias a esa incidencia divina, por medio de Pablo y Silas, Dios hizo que el carcelero viera algo diferente y sintiera la necesidad de ser salvo

Hechos 16:32-33 Y le hablaron la palabra del Señor a él y a todos los que estaban en su casa.

Y él, tomándolos en aquella misma hora de la noche, les lavó las heridas;

Y en seguida se bautizó él con todos los suyos.

Sólo hay una verdadera razón por la que existió una iglesia en Filipos. Esa razón es la mano soberana de Dios.

Por tanto, cada una de nuestras iglesias, donde, con temor y temblor, se predica a Cristo, no podemos menos que ver la grandiosa soberanía de Dios.

  1. Agradecidos Con Dios Por La Iglesia y cada uno de sus miembros.

Necesitamos aprender a dar gracias a Dios por la contribución de cada hermano a la causa del Evangelio.

Filipenses 1:5 por vuestra comunión en el evangelio, desde el primer día hasta ahora;

Necesitamos recordar, hacer memoria por la contribución, la cooperación que cada uno de nuestros hermanos hace a la causa del Evangelio.

Y de esa manera orar por y para que cada uno de los miembros del cuerpo de Cristo, no solo forme parte de la iglesia,

Sino que, oremos para que todos y cada uno, nos involucremos en la predicación del Evangelio,

Que seamos participes de las buenas nuevas de salvación y el ensanchamiento del reino de los cielos

Agradecidos con Dios por la iglesia

Sin olvidar jamás, que ha sido Dios quien abrió nuestros corazones para creer y ha sido Dios quien mueve nuestros corazones a contribuir.

¿Por qué no lo podemos olvidar? Porque ninguna de esas cosas, creer en el Señor y servir a Su causa, son  deseos humanos normales.

Y porque ninguna de esas acciones son el resultado del ingenio humano o de la iniciativa personal.

  • Agradecidos Con Dios Por La Iglesia y Su obra en los creyentes

Nuestra gratitud y gozo por la iglesia, se debe fundamentar en Cristo y Su obra, de inicio a final, en la vida del creyente.

Filipenses 1:6 estando persuadido de esto,

Que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;

Podemos estar firmemente convencidos de que, quien inició en nosotros la buena obra, la irá consumando hasta el día de la venida de Cristo Jesús.

Y esto es un gran aliento para la iglesia, porque la vida cristiana no es fácil, no esta exenta de pruebas y dificultades

De suerte tal que la Biblia describe la vida cristiana como un viaje que a veces nos lleva por el desierto, por el horno de fuego y por la tempestad

De modo, que el creyente se cansa, se confunde, duda y muchas veces reniega hasta el punto de preguntarse dónde está Dios.

Y todo ello nos lleva a batallar fuerte para ver las promesas de Dios cumpliéndose en nuestra vida.

E incluso, podemos llegar a sentir que seguir a Cristo nos trae más sufrimiento que bendiciones, que los principios bíblicos no funcionan y que los malos siempre ganan.

Y todo ello hará que sintamos que estamos solos y que somos incomprendidos, marginados o excluidos.

Sin embargo, es urgente que en momentos así recordemos que ¡La obra de Dios aún no está concluida en nosotros¡

Y que la maravillosa Verdad de la Palabra, dentro de la gran soberanía de Dios, se hará realidad ¡Dios termina lo que comienza¡

Por tanto, no desmayemos, sino que con inmensa gratitud, hagamos memoria de la perfecta obra de Dios en la vida de los suyos.

  • Agradecidos Con Dios Por La Iglesia y la soberanía divina

Cuando parezca que estamos perdiendo una batalla contra el pecado, podemos decir con firme esperanza, que la victoria será nuestra

Porque Cristo está obrando en nuestra vida a todo momento ¡Para completar lo que ha empezado¡

Romanos 8:29-30  Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien,

Esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.

Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo,

Para que él sea el primogénito entre muchos hermanos..

Nada puede traer más quietud al alma, que saber, que todo lo que acontece en la vida de la iglesia, se encuentra en la soberanía divina

Y que por tanto, podemos descansar, estar quietos y confiados, que por grande que sea la tribulación ¡Eso nos ayudará a bien¡

¿Por qué? Porque así lo dice la Palabra de Dios, porque nada acontece fuera del propósito santo de nuestro Dios

Y porque las dificultades en la vida del creyente no son para muerte, sino para perfeccionar el carácter de Cristo en nosotros.

Así que, aprendamos a orar por nuestros hermanos de la iglesia, principalmente dando gracias a Dios por haberles dado la salvación

Y luego, agradezcamos a Dios por impulsar a cada creyente al servicio, a ser partícipe del Evangelio

Finalmente, demos gracias a Dios por su maravillosa promesa de terminar Su obra en cada uno de los que hemos creído.

  1. Agradecidos Con Dios Por La Iglesia y por la maravillosa gracia.

Filipenses 1:7-8 como me es justo sentir esto de todos vosotros, por cuanto os tengo en el corazón;

Y en mis prisiones, y en la defensa y confirmación del evangelio,

Todos vosotros sois participantes conmigo de la gracia.

Porque Dios me es testigo de cómo os amo a todos vosotros con el entrañable amor de Jesucristo.

Hay una gracia de la que simplemente no podemos participar a menos que estemos sufriendo. Por ejemplo:

No podemos saber que Dios es proveedor si nunca hemos experimentado necesidad y No podemos conocer a Dios como sanador si nunca hemos estado enfermos.

Tampoco podemos conocer a Dios como defensor, si nunca hemos estado en peligro.

Entonces, hay ciertas áreas de la gracia divina que simplemente no podremos conocer a menos que suframos.

De modo que podemos comprender que el sufrimiento no siempre es malo, sino que produce beneficios en nuestro espíritu

2 Corintios 12:9 Y me ha dicho: Bástate mi gracia;

Porque mi poder se perfecciona en la debilidad.

Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo.

¿Qué produce la gracia divina en nuestra vida? ¡Fortaleza¡ y nos proporciona el conocimiento del poder de Cristo en nuestra vida

Así que, estaremos agradecidos eternamente por la iglesia del Señor, porque al formar parte de ella, podemos disfrutar de la maravillosa gracia de Dios.

  • Agradecidos Con Dios Por La Iglesia y el conocimiento de Jesucristo

Filipenses 1:9 Y esto pido en oración, que vuestro amor abunde aún más y más en ciencia y en todo conocimiento,

La oración de Pablo por la iglesia, es que crezca en el amor a Dios, en el conocimiento de Su Persona y Su obra, así como en todo discernimiento

Y ese crecer en conocimiento tiene un objetivo, un propósito, que es lograr construir una dependencia tal de Jesucristo y la Palabra

De manera que podamos tener discernimiento a la hora de tomar decisiones, de enfrentar peligros y tentaciones.

Por tanto, el formar parte de una iglesia, el ser parte del cuerpo de Cristo, nos trae grandes beneficios y bendiciones físicas y espirituales

Razón por la cual no podemos de dejar de agradecer a Dios por la iglesia, de orar por cada uno de nuestros hermanos de la fe.

Y sin olvidar que tanto, ser parte de la iglesia como el crecer en el conocimiento de Jesucristo, es algo que solo podemos lograrlo ¡Por gracia¡

  • Agradecidos Con Dios Por La Iglesia y su propósito

Filipenses 1:10 para que aprobéis lo mejor, a fin de que seáis sinceros e irreprensibles para el día de Cristo,

¿Cuál es el propósito de crecer en el conocimiento de Jesucristo?

El propósito es crecer en discernimiento para que podamos ver la diferencia entre el bien y el mal,

De manera que podamos inclinar nuestro corazón por el bien, por la Verdad de Dios y así podamos mantenernos limpios y sin falta delante del Señor

En otras palabras, la iglesia nos permite conocer mejor a Cristo y comprender mejor lo que es agradable ante sus ojos.

Filipenses 1:11llenos de frutos de justicia que son por medio de Jesucristo,

Para gloria y alabanza de Dios.

La Escritura nos deja claro cuál es el deseo de Dios, de modo entonces que debemos aprender a orar para que todo creyente llegue a conocer mejor a Cristo,

Y así podremos vivir una vida placentera, y podremos presentarnos ante Cristo irreprensibles, llenos de buenas obras, habiendo glorificado al Padre.

Por lo que, de manera gozosa, podemos alabar al Señor por la maravillosa gracia que nos sostiene delante de Él.

  1. Agradecidos Con Dios Por La Iglesia y el privilegio de la oración

¿Por qué cosas oramos realmente? ¿Qué tipo de “necesidades” dominan nuestras oraciones?  ¿Cómo oramos por lo que esperamos que suceda?

En la oración, le decimos a Dios lo que pensamos, qué necesitamos, qué nos duele o preocupa, dónde necesitamos la intervención divina

Pero, ahora que conocemos la oración de Pablo, necesitamos reflexionar sobre lo que realmente debemos pedir a Dios:

Necesitamos aprender a orar por que todos los santos del Señor, participemos del Evangelio, en un profundo amor por los que aún no son salvos

También es urgente que oremos para que Dios, en su infinita misericordia, complete la buena obra que ha comenzado en cada uno de los que hemos creído

Además, debemos aprender a orar para que el amor de cada creyente abunde cada vez más en conocimiento de Jesucristo

Y para que todos podamos crecer en buen juicio, para que podamos discernir lo que es mejor, lo qué es la Voluntad de Dios para la iglesia

De modo que podamos glorificar al Padre que nos eligió, y podamos crecer en frutos del Espíritu

Por tanto, necesitamos aprender a orar por la iglesia, y que nuestra oración sea apasionada, esperanzadora y llena de gozo

Ese gozo que proviene de la obra continua de Cristo en nuestra vida, del compañerismo cristiano, de la esperanza de la vida eterna.

Entonces, que nuestra oración y nuestro amor por la iglesia, de cómo resultado actos de amor por los demás, cristianos e incrédulos.

  • Agradecidos Con Dios Por La Iglesia y la esperanza en Cristo

Nuestra oración debe ir más allá de lo que estemos enfrentando, podemos animarnos porque la buena obra de Dios continúa en nuestra vida, aunque no podamos percibirla.

Y esta promesa de Dios nos trae esperanza porque sabremos que Él continúa su obra justo en medio de esa situación difícil en el trabajo, en la familia, en la salud, las finanzas,

O en cualquier lucha de alma que tengamos, ya sea depresión, soledad, frustración, desanimo, ¡Lo que sea que estemos viviendo¡

¿Qué es lo que necesitamos para avanzar? Someternos al Señor y a Su Palabra, porque es Su presencia y obra fiel la que nos da confianza.

Y de manera especial, cuando parezca que estamos perdiendo una batalla contra el pecado, podremos estar seguros de la victoria porque Cristo está obrando

Por tanto, será nuestra confianza centrada en Cristo la que nos llevará hacia nuestra meta final, aquello para lo cual fuimos hechos: la alabanza y gloria de Dios.

  • Agradecidos Con Dios Por La Iglesia y por el crecimiento en la gracia.

Tengamos presente que el crecimiento en la gracia de Dios es un proceso, que muchas veces avanza lento, ¡No es un evento¡

Y recordemos que las cosas difíciles no se acabarán de repente solamente porque las hayamos encomendado al Señor.

Sino por el contrario, la Biblia describe la vida cristiana como un viaje que a veces nos lleva por el desierto o por los hornos de fuego.

De manera entonces, que todo lo que necesitamos es conocer y confiar en Aquel que entiende, y que sabe exactamente lo que está haciendo en nuestra vida.

Y no olvidar jamás, que estamos en manos de un Dios soberano, inmensamente bueno y santo, que todo lo permite con un propósito.

¡Solamente confiemos¡  y oremos para que la iglesia crezca en esa confianza en el Dios que la tomo, la sustenta y la hace perseverar en Su gracia.

  • Agradecidos Con Dios Por La Iglesia que puede ver ¡Con los ojos de Cristo¡

Aunque muchas veces podemos descalificar la iglesia por encontrarse llena de pecadores redimidos, llenos de debilidades y muchas luchas

Debemos saber que el dueño de la iglesia, Aquel que la compro con sangre, puede hacer todo lo necesario para transformar esa iglesia en una nueva realidad

¿Cómo nos anima Dios a mirar nuestra vida de una nueva manera? ¿Qué quiere Dios que veamos?

Agradecidos con Dios por la iglesia

La Escritura es clara cuando nos dice que somos nuevas criaturas, que el Señor nos transforma día a día, y que la meta de la santificación la alcanzaremos en el día final

Y también nos dice que Dios vencerá a todo enemigo, siendo la muerte el último enemigo; que seremos semejantes a Dios y viviremos con Él para siempre.

Por tanto, con esta información bíblica, podemos fortalecer nuestra fe y esperanza, porque podemos ir en la dirección correcta al conocer nuestro destino final

A su vez, ese conocimiento bíblico nos ayuda a ver las circunstancias diarias de nuestra vida, a la luz de la eternidad

De manera entonces, que podemos apartar nuestros ojos de lo temporal y perecedero para ver la eternidad y comprender lo que realmente es importante en la vida.

Por tanto, conocer las Escrituras nos permite ver la vida con los ojos de Cristo, nos ayuda a entender nuestro destino final

Y al hacerlo así, entonces podemos darle sentido a nuestros día a día, a nuestro aquí y ahora, porque sabemos que no solamente existimos

Sino que tenemos un destino maravilloso, al cual llegaremos un día, y mientras tanto, amemos la iglesia, oremos por ella y glorifiquemos a Dios.

Conclusión

Agradecidos Con Dios Por La Iglesia, porque está es la institución que Él nos dejo para poder conocerle, poder crecer y ser verdaderos hijos

Porque es en la iglesia el lugar al que podemos llegar y depositar todas nuestras cargas, formar parte de una gran familia y encontrar consuelo y esperanza

Y es en la iglesia donde Dios nos muestra la Escritura, Su Voluntad,  para que podamos mirarlo Él, conocer Su Persona y su obra perfecta

Para luego, que cada uno de nosotros miremos de nuevo nuestras vidas con esperanza y entendimiento.

Y cuando vivamos esas situaciones en las que muchas veces no tenemos palabras suficientes para agradecer las cosas que tenemos y las que no tenemos,

O no podamos entender por lo que pasamos, lo que vivimos, recordemos entonces, que estamos en manos de un Dios Soberano

Y que de manera maravillosa, ese Dios completará la obra que ha empezado en cada uno de los que hemos creído

Por tanto, mantengámonos agradecidos con Dios por su grandiosa iglesia, por ese cuerpo de Cristo al que ahora podemos pertenecer.

 

 

[1] Timothy S. Lane, Paul David Tripp, ¿Cómo Cambia la Gente? 23.