Dichosos Los Justos Porque Dios Conoce Su Camino. Salmo 1:6 Los justos son dichosos no solo porque se alejan del pecado, no solo porque meditan y se deleitan en la ley de Dios y dan fruto, sino también porque Dios cuida el camino de ellos,

Dios cuida su forma de vivir, no están solos sino que hay un Dios personal que se ocupa de que sus pasos se dirijan por el camino de la santidad, para ello les ilumina con la Palabra, les alimenta, cuida y guía como un buen pastor.

Versículo de referencia

Salmo 1:6 Porque Jehová conoce el camino de los justos; Mas la senda de los malos perecerá.

(BAD)  Porque el Señor cuida el camino de los justos, más la senda de los malos lleva a la perdición.

Dichosos los justos porque Jehová conoce su camino

Cuando dice el salmista que Jehová conoce el camino de los justos, lo que se subraya es que Dios le «conoce» íntima y personalmente. Y por lo tanto cuida de ellos.

Dios por su Omnisciencia conoce al hombre, Dios conoce a aquellos que ha elegido y los conoce desde antes de la fundación del mundo, ahora este conocimiento lleva implícito el cuidar de ellos mientras caminan en medio de un mundo caído hasta llevarlo a la consumación de la vida eterna.

Ahora bien, cuando hablamos que Dios conoce y cuida a los suyos estamos hablando de una labor pastoral como lo expresa el Evangelio de San Juan en los siguientes versículos:

“Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen, así como el Padre me conoce, y yo conozco al Padre;(B) y pongo mi vida por las ovejas.

También tengo otras ovejas que no son de este redil; aquéllas también debo traer, y oirán mi voz; y habrá un rebaño, y un pastor.» Juan 10:14-16.

Es esa labor pastoral que permite conocer a las ovejas del redil, amarlas de manera tal que se llega a dar la vida por ellas. Dar la vida, en el caso nuestro, significa invertir nuestro tiempo en la gente, ayudarles en sus dificultades, orar constantemente por ellas.

Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida eterna; y no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano. Mi Padre que me las dio, es mayor que todos, y nadie las puede arrebatar de la mano de mi Padre.

Juan 10:27-29 

Es por medio de la predicación expositiva de la Palabra, que las ovejas logran oír la voz de Dios, y por medio de ella, seguirle, obedecerle, discernir la verdad bíblica, renovar la mente y el entendimiento, de manera tal que no se perderán en medio de la confusión

Como ovejas del Señor, tenemos la certeza de que nadie nos arrebatará de su mano, porque es el Eterno Dios quien nos eligió y nos ha entregado en fe a Cristo. Es el Todopoderoso el que nos ha dado vida para no perecer jamás.

  1. Dichosos los justos porque el Señor cuida su camino

¿Qué quiere decir el salmista con que el Señor cuida el camino de los justos?

  • Nos cuida porque somos suyos

Dios cuida de nosotros primeramente y de manera gloriosa por el hecho de habernos traído a su redil, al habernos buscado y encontrado, porque éramos “ovejas perdidas”, “ovejas sin pastor” y ahora le pertenecemos a Él

Y ahora hay un rebaño y un Pastor, primeramente el pastor de los Pastores que es Cristo, quien en su gracia y misericordia, cuida de nosotros en el día a día, nos sustenta y sostiene, nos provee y consuela, nos da la esperanza gloriosa de la vida eterna.

Y segundo, nos cuida al habernos regalado Pastores, que nos apacientan con ciencia y con amor, hombres con un llamado especial que alimentan, cuidan, acompañan, consuelan a las ovejas del Señor.

  • Dios nos cuida por medio de su Palabra,

Nos ha dado Dios el inmenso privilegio de poder oír su voz por medio de la predicación de las Escrituras, en la cual nos expresa su voluntad buena, agradable y perfecta y nosotros le seguimos en obediencia.

  • Nos cuida de manera segura

Nos cuida de forma que nadie puede arrebatarnos de su mano, y aquí si aplica que “nadie es nadie”, ni lo alto, ni lo profundo, ni principados ni potestades, ni lo presente, ni el futuro, ni la vida ni la muerte, ni ninguna cosa creada.

  • Nos cuida con garantía eterna

Nos ha dado la vida eterna, y nos asegura que no pereceremos jamás. Esto significa que la perseverancia de los santos está asegurada, hasta el más pequeño de sus elegidos entrara gozoso a la plenitud de la vida eterna.

  1. Dichosos los justos porque en ellos está el querer y el hacer

Tenemos la certeza de estar en las manos del Señor, que allí estamos seguros, que nada ni nadie nos podrá arrebatar. Tenemos su promesa de vida eterna, la garantía de que llegaremos a la meta gloriosa,

Pero también hay que recordar que una vez hemos sido justificados, que hemos sido exonerados de toda culpa y acusación delante del Padre, hay una responsabilidad personal que no podemos evadir, y que ha de evidenciar que somos “ovejas de su redil”

Tenemos la responsabilidad de vivir evidenciando el carácter santo de los justos, porque la evidencia de haber sido justificados es la santidad, y la evidencia de la santidad es la felicidad, tal como lo expresa el Salmo 1:1

Sobre todo, conocer a Dios no es simplemente tener conciencia de su existencia, conocerlo es reconocerlo como lo que éL es, el Señor soberano que demanda la obediencia del hombre, y especialmente la de su pueblo Israel, con el que ha hecho un pacto.[1]

“Mis ovejas me conocen, oyen mi voz  y me siguen”  Juan 10:14-27.

  1. Dichosos los justos porque su senda No perecerá

Ahora veamos la otra cara de la moneda según el Salmo 1:6 dice “….Másla senda[2] de los malos perecerá[3]hagámonos la siguiente pregunta:

  • ¿Cuál es el camino de los malos?

El camino de los malos o sea, la forma de vivir de ellos, esta inclinada al pecado. Sabemos que  la voluntad emana de la naturaleza de la persona, de manera que si la naturaleza es caída su voluntad siempre estará inclinada a la maldad.

  • ¿Cómo viven los malos?

Su conducta es reprobada, sus costumbres son mundanas, viven fornicando, están de lado de todo aquello que es enemigo de Dios, su misión es pecar, y su viaje conduce a un destino de “perdición eterna”

Pero mientras avanzan por el mal camino, se arruinan, se corrompen, desfallecen, el infortunio es parte de su vida, y al final terminan destruidos y separados de Dios eternamente.

Conclusión.

Dichosos los justos porque el Señor conoce su camino, los cuida, los preserva, los sustenta, los lleva por sendas de rectitud y justicia.

El Señor conoce quiere decir que el Señor vigila, que entra en un íntimo y amoroso cuidado de los justos.

Y notamos el contraste entre la primera palabra de este salmo “Bienaventurado” es decir, felices los justos, y la última palabra que tiene que ver con el fin no solo de la senda sino también de la vida de los malos “Perecerá”,

Ante esto no podemos menos que dar gloria a Dios por habernos hechos justos, por cuidarnos cada día, por haber asegurado la perseverancia de los santos y por encaminarnos a un fin glorioso.

Sigamos escuchando su voz, para caminar rectamente.

 

 

[1] Nuevo Diccionario Bíblico Certeza, significado de la palabra “Conocer”.

[2]Dérek de H1869; camino (como pisado); figurativamente curso de la vida o modo de acción, a menudo adverbio:- asunto, calzada, camino, carrera, conducir, conducta, corredor, costumbre, curso, dar (al oriente), encrucijada, fornicar, jornada, lado, marchar, misión, oriental, proceder, rastro, rumbo, senda, vereda, vía, viaje.

[3]Perecer: abad raíz primaria; propiamente a descarriarse, es decir, perderse; por implicación perecer (causativo destruir, alejar, arruinar, corromper, derribar, desaparecer, desfallecer, destrucción, destruir, hacer perecer, huida, infortunio, morir, perder, perdido, perecer.