¿Dónde Están Los Que Te Acusan? Este es un relato que nos muestra el pecado del hombre y la Gracia de nuestro Señor Jesucristo, el Legalismo del corazón humano, el dolor destructivo del pecado, y la luz que ilumina el corazón humano.

Los que rechazan la luz y los que la aceptan en un genuino arrepentimiento, y la maldad del orgullo al querer callar la voz de la Verdad que es Cristo.

Juan 8:7-11  Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella.(aplicando la misma ley)

E inclinándose de nuevo hacia el suelo, siguió escribiendo en tierra.

 Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio.

Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó?

 Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más.

Ese Legalismo del Corazón humano, lo encontramos en nosotros continuamente.

Como cristianos, podemos vernos representados en  la mujer adultera, pero también podemos encontrarnos reflejados en  los fariseos,

  • Primero nuestro pecado nos lanzo al polvo, nos llevo al punto bajo, tal como aconteció con la mujer adultera
  • Segundo, nos convertimos en acusadores, condenando el pecado de nuestro prójimo.

Veamos cómo se desarrollan estas dos facetas que llevan al Legalismo en el Corazón humano:

A. El pecado no confrontado, genera Legalismo en el Corazón del hombre:

En esta historia que relata el Capítulo 8 de Juan, vemos que predomina el pecado, recordándonos como, nuestra historia antes de Cristo estaba llena de pecado,

El pecado es una ofensa al Dios Santo, y causa de destrucción para el pueblo, para la iglesia, para la familia, para la persona, por eso es que Dios dice tantas veces en la escritura «No al pecado», si pensamos que alguno de los que estaban en esta escena estaba sin pecado nos engañamos ya que todos eran pecadores, a excepcion de Cristo, tal como lo explicamos a continuación.

  1. El pecado de esta mujer: Hay un pecado destructivo: Adulterio, que se caracteriza por ser un pecado que rompe la familia, divide a iglesia, que se ha convertido en un cáncer en la sociedad,

Un ejemplo de ello es Israel, a lo largo de su historia, nos deja ver que su mayor pecado es el adulterio espiritual, volviéndose constantemente hacia otros dioses, hacia los ídolos, dejando al único Dios vivo y verdadero.

En este caso del relato bíblico, el adulterio no solo es en contra del  esposo de esta mujer, sino que representa un adulterio espiritual, contra Dios mismo y finalmente es un pecado que termina MATANDO A LA MISMA MUJER.

Con tales consecuencias, lo encontramos reiteradas veces, denunciado en las Escrituras, tanto en el Antiguo Testamento como en el Nuevo:

 Éxodo 20:14  No cometerás adulterio.(J)

Mateo 5:27  Oísteis que fue dicho: No cometerás adulterio.(N)

Mateo 5:28  Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón.

El Adulterio es causa de destrucción para el pueblo, para la iglesia, para la familia, para la persona, por eso que Dios dice tantas veces No al pecado.

Y era el pecado del Pueblo de Israel, su historia está marcada por el adulterio espiritual, dejando a Dios y yéndose tras dioses paganos, dejando la comunión con Dios y enredándose en cobija ajena.

  1. El pecado de los fariseos, sus acciones eran injustas y sexistas, en realidad no era un juicio para la mujer sino para Jesús. Los fariseos en su LEGALISMO buscaban  una trampa para  PRENDER A JESÚS, ya que si el Señor hubiese respondido que mataran a la mujer lo habrían acusado con las autoridades romanas y si respondía que la dejaran libre lo habrían acusado de violar la ley de Moisés.

(BAD)  Con esta pregunta le estaban tendiendo una trampa, para tener de qué acusarlo. Pero Jesús se inclinó y con el dedo comenzó a escribir en el suelo.

Reflexionemos en que EL PECADO QUE MAS SE APEDREA ES precisamente NUESTRO MISMO PECADO. Cuando no hemos podido desprendernos de un pecado que nos asecha y lo llevamos oculto, es cuando insistentemente lo “apedreamos” en aquellos que lo practican.

El orgullo del corazón humano, es lo que lleva a acciones como estas. Jesús les restaba popularidad a los fariseos, la verdad encarnada de Dios estaba derribando su sistema religioso con apariencia de piedad.

Y era esta Verdad la que enardecía el corazón de la cúpula religiosa judía. Y les hacia actuar con tal perversidad, buscando siempre encontrar pecado en el Señor.

  1. El pecado de la multitud: “El que esté libre de pecado tire la piedra, BUSCANDO MATAR A LA MUJER.

Juan 8:7  Y como insistieran en preguntarle, se enderezó y les dijo: El que de vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella.

Con esta respuesta del Señor,  inesperada para ellos, les estaba aplicando la misma Ley. Esa misma Ley que ellos habían parcializado a su favor. Ahora el Señor la hacía extensiva e imparcial

Juan 8:9  Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio.

Este es el poder de la Palabra. Una Palabra que confronta y llega hasta lo más intimo del corazón, justo donde solo Dios puede llegar, cabe hacer memoria de la condición del Hombre en su estado caído.

Isaías 53:6  Todos nosotros nos descarriamos como ovejas,(E) cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.

Romanos 3:10  Como está escrito: No hay justo, ni aun uno;

1 Juann 1:8  Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.

No hay duda, todos los que no reconocen el poder Salvador de Jesucristo, ESTÁN CONDENADOS.

TODOS SOMOS CULPABLES , NOS HEMOS REVELADO CONTRA DIOS.

 B. Jesús esta con ella, La misericordia y la verdad se encontraron . 

1. La luz brilla en la oscuridad, les pone de manifiesto su pecado a los fariseos, se fueron uno a uno,

Juan 8:9  Pero ellos, al oír esto, acusados por su conciencia, salían uno a uno, comenzando desde los más viejos hasta los postreros; y quedó solo Jesús, y la mujer que estaba en medio.

Todos uno a uno se fueron, acusados por su conciencia y precisamente Jesús a puesto de manifiesto la condición del corazón de ellos, como Luz del mundo a hecho evidente la oscuridad del pecado que habita en sus corazones, al irse poco a poco, nos puede llevar a pensar que tal vez esa fue la primera vez que reconocieron su pecado, los siguientes versículos nos enseñan como el pecador rechaza la Luz de Cristo.

Juan 3:19-21 Y esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas.

Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas.

Mas el que practica la verdad viene a la luz, para que sea manifiesto que sus obras son hechas en Dios.

Juan 8:12  Otra vez Jesús les habló, diciendo: Yo soy la luz del mundo;(B) el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.

1 Corintios 1:18  Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios.

Ante lo anterior podemos encontrar dos respuestas del corazón humano, cuando es puesto en  evidencia por la luz de la Palabra de Dios:

  1. Iluminado su pecado, huye enfurecido, o
  2. Mira su pecado y se arrepiente.

Nuestro pecado es revelado por la luz de la Palabra, por la luz del Espíritu Sato, pero también por medio de la iglesia,

Cuando, por amor unos a otros, ya sea para fortalecernos o para advertirnos antes de caer, o para restaurarnos por medio de la DISCIPLINA, nos vamos confrontando a efectos de revelar  el pecado que obstaculiza nuestro caminar cristiano.

Esta confrontación entre hermanos debemos hacerla con amor, pues la verdad sin amor es cruel, y en lugar de edificar puede destruir. Nuestro propósito al señalar el pecado de otro siempre ha de ser la edificación.

Debemos tener en cuenta que esa confrontación también requiere valentía. Si amamos a nuestros hermanos debemos confrontar  su pecado. Recordemos el amor sin la verdad es deshonesto. Es amor oculto

2. Vete y no peques más. 

Jua 8:10-11  Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te acusaban? ¿Ninguno te condenó?

Ella dijo: Ninguno, Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete, y no peques más.

Esta escena  es descrita maravillosamente por el Sal 85:10 La misericordia y la verdad se encontraron;  La justicia y la paz se besaron. Cristo era el único que podía condenarla, pero contrario a lo que esperabamos, el Señor le extiende su gracia.

Ya que no es una segunda oportunidad, lo que ella necesitaba sino un Salvador que perdonara sus pecados, un PERDÓN gratuito para ella, fundamentado en el sacrificio de Cristo en la cruz del calvario. Al igual que ella el hombre en su estado caido necesita el perdón de Jesús.

La respuesta que Jesús le da a la mujer adultera, la podemos ilustrar así:

“Lo que tú no has cumplido, Yo lo voy a cumplir. El precio por tu pecado, Yo lo voy a pagar por ti, la ira de Dios padre Yo la voy a llevar por ti, me voy a poner en el lugar que a ti te corresponde»

Y tiene dos acciones maravillosas que nos hacen descansar:

  1. No te condeno: Solo es posible por su sacrificio en la cruz, la redención por medio de su muerte en la cruz, todo perdón tiene un precio, y está fundamentado en el sacrificio redentor del Hijo de Dios,

Es algo que nos llena de esperanza saber que no hay pecado tan grande ni tan profundo que la Gracia de Dios no pueda perdonar. Y para los que estamos en Cristo ya no hay condenación, ya no hay juicio. Ahora hay perdón, reconciliación, esperanza y vida nueva.

2. ¡!Jesús entra a la multitud con nosotros¡!,

Buenas nuevas “No te condeno, vete y no peques más” fueron las palabras mas dulces que esta mujer pudo haber oído durante toda su vida, ahora nos preguntaos como ella iba a llevar una vida de santidad de aqui en adelante, la respuesta la encontramos a continuacion.

a. Solo es posible por medio de la nueva vida en Cristo.

Juan 20:31 Pero éstas se han escrito para que creáis que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que creyendo, tengáis vida en su nombre.

Vete y no peques mas” Dios imparte un nuevo poder en nosotros. Nos da el poder de reconocer el pecado, verlo despreciable, conocer su poder destructor y capacidad para luchar contra el

Todo eso es posible gracias a que Jesucristo opera en nosotros un Nuevo nacimiento, en el que se nos es dado un nuevo corazón. Un corazón que ama y busca agradar a Dios y confronta el pecado.

Juan 3:6 Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu,[a] espíritu es.

Con ese evento sobrenatural, La presencia de Dios está en nosotros.

 

Romanos 7:24-25  ¡Miserable de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo de muerte?

Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado.

 Solo por medio de Cristo podemos librarnos del pecado que habita en nosotros.

 

Romanos 6:23  Porque la paga del pecado es muerte, más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.

El Padre nos a dado vida eterna en Cristo.

 

Romanos 5:20-21  Pero la ley se introdujo para que el pecado abundase; mas cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia;

Para que así como el pecado reinó para muerte, así también la Gracia reine por la justicia para vida eterna mediante Jesucristo, Señor nuestro.

 Por medio de la gracia manifestada en Cristo hemos sido justificados ddelante del Padre.

 

1 Timoteo 1:15  Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los pecadores, de los cuales yo soy el primero.

Cristo vino al mundo para salvar a los elegidos.

 Para poder discernir el poder maravilloso y glorioso de la Gracia Divina basta con echar un vistazo a la Ley:

Levítico 20:10  Si un hombre cometiere adulterio con la mujer de su prójimo, el adúltero y la adúltera indefectiblemente serán muertos.(B)

Deuteronomio 22:22-24  Si fuere sorprendido alguno acostado con una mujer casada con marido, ambos morirán, el hombre que se acostó con la mujer, y la mujer también; así quitarás el mal de Israel.

Si hubiere una muchacha virgen desposada con alguno, y alguno la hallare en la ciudad, y se acostare con ella;

Entonces los sacaréis a ambos a la puerta de la ciudad, y los apedrearéis, y morirán; la joven porque no dio voces en la ciudad, y el hombre porque humilló a la mujer de su prójimo; así quitarás el mal de en medio de ti.

Podemos entonces concluir:

¿Dónde se encontró la ley, la justicia, la ira y la gracia? En la cruz del calvario.

¡Ni yo te condeno!, lleva implícito el perdón de sus pecados, de lo contrario no puede ser absuelta de su pecado sino que merece la condena, este perdón está fundamentado en el sacrificio redentor de Jesucristo.

¡Vete y no peques mas¡ encuentra su explicación en el hecho de que Cristo es la luz del mundo,

Los fariseos, las multitudes, todos excepto Jesús, caminaban en tinieblas de pecado, en profundidades de obscuridad encubiertas de santidad.

 

 

 

 

Fuentes consultadas.

Biblia RVA60.

Diccionario VINE.

Comentario Evangelio San Juan, John Macartur.

Comentario Evangelio San Juan, Willian Hendriksen. 

 

 Estudio de palabras significativas.

 Condeno: katakrino(κατακρίνω, G2632) , forma intensificada del Nº 3. Significa dar juicio en contra, pasar sentencia sobre; de ahí, condenar

Vete: poreuo(πορεύω, G4198) , análogo a poros , pasaje. Significa en la voz media irse por el propio camino, irse de un lugar a otro 

No peques más .jamartano(ἁμαρτάνω, G264) , lit., errar el blanco, se utiliza en el NT: (a) de pecar contra Dios: (1) por parte de los ángeles (2Pe_2:4); (2) por parte del hombre (Mat_27:4 ; Luc_15:18, Luc_15:21, el cielo significando, por metonimia, Dios; Jua_5:14 ; Jua_8:11; Jua_9:2-3; Rom_2:12 , d

mekétide G3361 y G2089; no más, ya no:- no más, no de aquí en adelante.

meketi(μηκέτι, G3371) , con el mismo significado que Nº 1, pero expresando por lo general una prohibición

Acusados por su conciencia: lenco (ἐλέγχω, G1651) , convencer, dejar convicto, redargüir, reprender. Se traduce «cuando son puestas en evidencia», de todas las cosas, por la luz (Efe_5:13), donde el sentido es el de denunciar más que el de reprender. Véase CONVENCER, Nº 1, etc. elenco (ἐλέγχω, G1651) , convencer, refutar, reprender. Se traduce «redargüir» en Jua_8:46 : «¿Quién de vosotros me redarguye de pecado?» (rv , rvr ); 2Ti_4:2 : «redarguye» (rv , rvr ); en rv se traduce también en Mat_18:15 : «redargúyele» (rvr : «repréndele»); Jua_3:20 : «no sean redargüidas» (rvr : «sean reprendidas»); Jua_8:9 : «redargüidos de conciencia» (rvr : «acusados»); Jua_16:8 : «redargüirá al mundo de pecado» (rvr : «convencerá»); Jua_5:11 : «sino antes bien redargüidlas» (rvr : «reprendedlas»); véase CONVENCER, Nº 1, y también ACUSAR, A, Nº 4, EVIDENCIA, B, PONER EN EVIDENCIA, RECONVENIR, Nº 3, REPRENDER.