El Mandato Cultural De Dios Para La Humanidad constituye el primer mandamiento dado en las Escrituras

Y este, es importante conocerlo porque, en la medida que los creyentes cristianos van avanzando en su desarrollo académico y el Señor les concede culminar sus metas profesionales,

La iglesia debe compartir las alegrías de los éxitos en la vida de sus miembros, al igual que comparte y extiende el compañerismo cristiano con los que sufren.

Pero al contemplar esos logros, se encuentra una ocasión oportuna para traer a memoria lo que llamamos el “Mandato cultural”,

Sabiendo que, cuando en la iglesia hablamos de mandamientos, inmediatamente pensamos en los primeros dos grandes mandamientos que el Señor resumió:

“Amaras al Señor tu Dios con todo tu ser, y amaras a tu prójimo como a ti mismo”, y si vemos el Antiguo Testamento, pensamos en lo Diez mandamiento expresados en Éxodo 20

Sin embargo, en el libro de los inicios, en el Génesis, encontramos el primer mandamiento contenido en la biblia, y que se le ha llamado el “Mandamiento cultural”

  • ¿Qué es el Mandato Cultural?

Para entender qué es el mandamiento cultural, necesitamos entender el sustantivo Cultura, del cual se derivan dos actividades: Cultivar y culto.

Y el verbo “Cultivar” tiene que ver con todo lo que hacemos como seres humanos, todo lo que hemo creado desde los días de Génesis hasta ahora,

Mientras que, la palabra “Culto” hace referencia a la acción de adoración a Dios, de manera que todo lo que hagamos, debe ser para la gloria de Dios

De esta forma, el mandato cultural tiene que ver primero con la labor que Dios no ha asignado como mayordomos de su creación,

Para lo cual el hombre y la mujer de Dios deben prepararse continuamente, cada día debemos de estar aprendiendo algo nuevo,

Y los jóvenes deben de prepararse académicamente o técnicamente, según los dones y talentos de los que Dios les haya provisto.

Pero sin olvidar que todo lo que hagamos, donde quiera que estemos, podamos hacerlo para cumplir con la gran tarea de extender el reino de Dios aquí en la tierra,

Porque ese es el propósito para el cual hemos sido llamados y constituye la esencia del mandato cultural.

Si usted desea profundizar un poco más sobre la acción de dar gloria a Dios, por favor visite ¿Cómo Glorificar A Dios? !Porque De Él Es Toda La Gloria¡

El mandato cultural de Dios para la humanidad

El mandato cultural, dado por Dios en los inicios de la Creación, sigue vigente hasta el día de hoy, en la vida de la iglesia

¿Por qué? ´porque toda la tierra debe ser llena de la gloria de Dios y los mandados hacerlo, somos nosotros ¡Los creyentes¡

Y es justamente para eso, que Dios nos ha provisto de dones y talentos, que no debemos ni podemos divorciar de la vida de la iglesia,

Sobre todo cuando nuestros días se caracterizan por vivir un secularismo, donde divorciamos nuestro qué hacer cotidiano de nuestra vida de piedad

De modo que nos olvidamos de dar gloria a Dios en todo lo que hacemos, tanto dentro como fuera de la iglesia.

Texto de referencia.

Génesis 1:28 Y los bendijo Dios, (E) y les dijo:

Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla,

Y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.

Este es el primer mandamiento que encontramos en la Biblia y que nos deja bien claro, cuál es el propósito para el cual fue creado el hombre y la mujer

¡Multiplicar y fructificar¡ de modo que toda la tierra se llene de la gloria de Dios, tanto en los cielos como en la tierra, y debajo de la tierra

Es ´por ello que todo lo que el hombre hace está estrechamente relacionado con la gloria de Dios

Para ello, es necesario que todo creyente, se esfuerce día a día en su preparación, en el desarrollo de sus dones y talentos, lo que incluye su preparación académica

Pero sin perder de vista, que toda preparación jamás debe tener como propósito, engrandecer al hombre, porque esta acción tuerce nuestro camino y trae infelicidad,

Sino por el contrario, todo desarrollo humano, académico, debe dirigirse a engrandecer el Nombre de Dios

  1. Características del mandato cultural.

Este mandamiento tiene la característica de ser una bendición que Dios nos ha dado, pues nos ha tomado en cuenta y nos ha asignado la tarea de ensanchar Su reino aquí en a tierra.

También, este mandamiento implica un trabajo, una responsabilidad apremiante, en la que debemos de dar fruto,

Y no un fruto enmarcado en lo puramente material, sino un fruto que glorifique a Dios, enmarcado en hacer lo que Él dice,

Además, somos mandados a multiplicar, hacer discípulos de Jesucristo, y esta es una tarea de avanzar, llenando y administrando las cosas de Dios en este mundo creado.

  • ¿Qué implica el mandato cultural?

“El mandato cultural de Dios va más allá de tener un buen tiempo de adoración los domingos y tratar de vivir una vida recta,

¿Por qué? Porque el mandato cultural tiene que ver con la cultura y el culto, con la vida en la iglesia y fuera de ella,

Y tiene que ver con producir y cultivar, con prepararse académica y culturalmente para fructificar, pero en esto, la iglesia de Cristo comenzó a perder la batalla

¿Por qué? Porque la iglesia actual ha tomado una actitud anti intelectual, debido a un mal entendimiento de la santidad y de nuestra relación con el mundo.”[1],

De modo que los creyentes hemos olvidado que debemos ser una contracultura en el mundo,

Es decir que en los campos de la ciencia, del arte, del deporte, de la política, de la economía, etc. el cristiano debe predicar y testificar la gloria de Dios

Sin divorciar el conocimiento teológico del conocimiento secular ¿Por qué? Porque la iglesia es la única institución en este mundo que muestra al verdadero Dios

Y porque solamente a través de la predicación de la Palabra de Dios, en Su gracia, se pueden producir cambios verdaderos, profundos y santos en la vida de las personas

Entonces, cada nuevo profesional que ha nacido de nuevo, que tiene un corazón entendido y dócil a la Palabra de Dios, entenderá que Dios es el Creador de todo

Y que todo cuanto existe ha sido creado solo y exclusivamente, para la Gloria de Dios.

  1. El mandato cultural y la creación del hombre.

Génesis 1:27 Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.

Hombres y mujeres hemos sido creados a “Imagen de Dios”, a semejanza de Él, pero jamás dice la Escritura que fuimos creados “dioses”

De manera que el corazón humano debe entender que Dios es Dios, es el Creador, y que nosotros somos sus criaturas, obra de sus manos

Y que, en los inicios, todo fue hecho bueno ¡En gran manera¡ lo que significa que no hubo imperfección ni despropósito en Dios.

Génesis 1:31 Y vio Dios todo lo que había hecho, y he aquí que era bueno en gran manera. Y fue la tarde y la mañana el día sexto.

Entonces, en esta tarea del mandato cultural, es importante tener un concepto bíblico de lo que significa para nosotros, el ser creado a la imagen y semejanza de Dios.

De manera, que todo hombre y mujer, pueda comprender las dos caras de la existencia humana: nuestra humildad, y nuestra dignidad.

  • Ser imagen de Dios, nos hace dependientes de Dios

Somos “imagen de Dios”, no somos Dios, somos creados y por tanto, somos finitos, limitados por el tiempo, y el espacio,

Pero de manera especial, ser imagen de Dios nos hace dependientes de Dios para el desarrollo de nuestro conocimiento

Colosenses 2:3  en quien están escondidos todos los tesoros de la sabiduría y del conocimiento

El humanismo ha llevado al hombre a ocupar el lugar de Dios, el hombre en la cultura del mundo, se siente cada día más grande y considera a Dios cada día más pequeño,

Esta realidad nos hace vivir en una sociedad en la cual el Nombre de Dios es irrelevante, y que día a día puja por sacarlo de todo el quehacer humano,

Y es allí donde destaca la enorme y urgente responsabilidad que la iglesia tiene de ejercer el mandato cultural

 

Jesucristo es el Evangelio

De modo que, a través de la cultura y el culto a Dios, se pueda llevar soluciones a las necesidades humanas cada vez más profundas,

Pero sin olvidar que la necesidad más grande de las personas tienen, no es la carencia de bienes materiales o de salud física,

Sino que la necesidad más grande y urgente que todo ser humano tiene, es el no tener a Cristo en su corazón,

Por tanto, todo nuestro quehacer cotidiano, nuestra profesión u oficio, debe  mostrar algo más grande a las personas y ese es Dios.

  • Ser imagen de Dios nos debe hacer ¡Humildes¡

Génesis 2:7 Entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra,

Y sopló en su nariz aliento de vida, y fue el hombre un ser viviente.

 

La Escritura aclara que los hombres fuimos hechos de un material muy insignificante “polvo de la tierra” lo que significa «las partículas más menudas del suelo»,

Y esta gran verdad bíblica, nos enseña que todos, hombres y mujeres, pobres y ricos, sabios o necios, procedemos de un mismo origen,

Entonces, por muchos triunfos personales, por mucho éxito en los negocios, o por muchos títulos académicos que vayamos acumulando,

¡Nunca debemos olvidar nuestros orígenes¡ de modo que no demos paso a la arrogancia y la soberbia, la altivez y la prepotencia,

Porque esas facetas del corazón humano ¡No están contempladas dentro del mandato cultural¡ mas por el contrario, nos impiden ser verdaderos colaboradores de Dios

Aún cuando en el mundo las personas que nos rodean se gloríen por sus propios triunfos, sintiéndose llenos de su propia importancia y actúen como si fuesen dioses.

Sin embargo, el creyente ha de tener presente que solamente es ¡Arcilla¡ simple polvo, pero en manos del Gran Alfarero

Por tanto, seamos humildes, no olvidemos nuestro origen ni el propósito para el cual hemos sido creados.

  • Ser creados a la imagen y semejanza de Dios ¡Nos da dignidad¡

La esclavitud en el mundo, la opresión y maltrato que vivamos, el ser humillados y marginados, nos puede llevar a pensar que no poseemos valor

Pero eso no es así, el valor de todo hombre y mujer, radica en el hecho de haber sido creado a imagen y semejanza de Dios

Sin embargo, también se corre el riesgo de que el oprimido llegue a ser el opresor, de que enfrentemos la tentación de maltratar al débil y al vulnerable

De modo que el cristiano, sino tiene cuidado, sino recapacita en que la dignidad humana de toda persona radica en ser creados a imagen y semejanza de Dios

Corre el riesgo de vivir contrario a lo que define la Ley de Dios, que nos manda a proteger a los más desfavorecidos, a tratar honorablemente a pequeños y grandes

Y sin importar el origen, la clase social o la condición económica, todas las personas deben ser tratadas con el honor que merecen ¡Por ser imágenes del Dios invisible¡

Es allí donde está la dignidad de la persona humana.

  1. Nuestra responsabilidad dentro del mandato cultural.

Hemos comprendido que el mandato cultural tiene como propósito llevar a todo ser humano a cultivar una cultura terrenal orientada a dar gloria a Dios

Pero también, este mandato cultural define a la humanidad dos grandes responsabilidades básicas: multiplicación y dominio.

Génesis 1:28 Y los bendijo Dios, (E) y les dijo:

Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla…

La primer responsabilidad que Dios le dio a Adán y a Eva fue, la de fructificar y multiplicarse

Esto significa que la tarea de ellos era producir suficientes réplicas de la imagen de Dios de tal manera que la tierra se llenase.

Y segundo, Dios le ordenó a esta primera pareja, que ejercieran dominio sobre la tierra, que sojuzgaran sobre todo lo creado

De manera que Adán y Eva habrían de ejercer autoridad sobre la creación, administrando los vastos recursos que Dios les había encomendado.

Y estos dos mandatos son inseparables, pues para multiplicar necesitamos tener dominio, y no se puede ejercer dominio sino se tiene una multiplicación exitosa

Sin embargo, lo que no debemos olvidar es que este mandato cultural es lo que determina nuestra labor principal en la vida

  • El mandato cultural de ¡La multiplicación¡

La única forma de multiplicar y fructificar es teniendo hijos e hijas que han de ser instruidos en la fe cristiana de modo que lleguen a ser discípulos de Cristo

En este sentido llenamos la tierra como imágenes de Dios, al extender el mensaje de Cristo por todo el mundo, comenzando desde nuestro hogar.

Y por tanto, podremos cumplir el mandato cultural solamente por medio del cumplimiento del mandato de la predicación del Evangelio.

En ese sentido, la gran comisión dada por el Señor a toda la iglesia, es el instrumento que nos permite cumplir con la misión de multiplicar la imagen de Dios en toda la tierra.

  • El mandato cultural de ¡Ejercer Dominio¡

En la medida que los cristianos nos preparamos en las ciencias, las artes, las técnicas y en el conocimiento teológico,

En esa medida vamos ejerciendo dominio sobre todo aquello que Dios pone en nuestras manos, y vamos teniendo oportunidad de testificar el gobierno de Dios

De modo que en cada área de nuestra vida, en cada espacio en el que nos movemos día a día, tenemos la oportunidad para proclamar el gran mensaje de la creación

¿Cuál mensaje? El mensaje que Dios reina, gobierna, domina sobre todo lo creado y merece toda nuestra adoración,

De modo que vamos a mostrarle al mundo que Cristo gobierna nuestra vida, nuestros afectos, nuestros pensamientos, nuestras motivaciones, nuestros actos,

Y que dentro del mandato cultural, el hablar de Cristo en cada oportunidad que se nos presente, es lo que garantiza que ese dominio santo se vaya a extendiendo en todo nuestro entorno.

  • El testimonio bíblico

A lo largo de toda la Escritura vamos encontrando el testimonio de muchos hombres de Dios que entendieron bien el mandato cultural y vivieron de acuerdo a él

El ejemplo de José,

Que uso sus dones y talentos en habilidades gerenciales, para glorificar a Dios en un país pagano, que se mantuvo fiel a Dios a pesar de las amenazas, calumnias.

Moisés

Que fue educado en lo mejor de la ciencia de Egipto pero que jamás perdió su identidad, usando ese conocimiento para la gloria de Dios,

Daniel

Que fue un gran estadista en medio de un mundo pagano, que conservo sus valores y fue de influencia para muchos

Pablo

Que fue educado a los pies de Gamaliel, hablaba al menos cinco idiomas, y que después de ser un perseguidor de la iglesia, luego fue un incansable multiplicador del Evangelio,

Los discípulos

Que podríamos pensar que eran simples pescadores, hombres sin letras y que pertenecían al vulgo

Sin embargo, estos doce hombres tuvieron al Señor como su maestro durante largos tres años, siendo instruidos por doce o catorce horas diarias.

Todo ese estudio personalizado les equivale al menos a una licenciatura y una maestría con el Maestro de maestros, el mismo Señor Jesucristo.

Cada uno de estos testimonios nos deja claro que solamente poniendo al servicio nuestros dones y talentos, capacitándonos en toda ciencia

Solamente así, será posible cumplir con el gran mandato cultural de ¡Sojuzgar y ejercer dominio sobre todo lo creado¡ para la gloria de Dios

  1. El mandato cultural en la actualidad.

Colosenses 3:17 Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho,

Hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él. (G)

El mandato cultural dado en Génesis 1, sigue en nuestros días, de modo que todo lo que el hombre haga o piense, debe estar en armonía con la gloria de Dios

Y esa obediencia hace que todo lo que hagamos en el día a día, encaje perfectamente en la Voluntad de Dios y seamos bendecidos

De modo que hacer todas nuestras cosas, en el Nombre del Señor, nos lleva a mantener una relación vital con Él, en sujeción a Su autoridad y dependiendo de Su poder,

Porque solamente así, los creyentes podremos tener vidas útiles, que edifiquen familias e iglesia, que traiga beneficios a nuestro prójimo y gloria a nuestro Dios.

  • Tener gratitud

Colosense 3:23 Y todo lo que hagáis, hacedlo de corazón, como para el Señor y no para los hombres;

Ninguna persona es capaz de hacer lo bueno a menos que Cristo more en sus corazones

Es por ello que los cristianos estamos llamados hacer todas las cosas, de corazón, de manera genuina, no por apariencias

De modo que las personas que no son cristianas, pueda ver a Cristo a través de nosotros

Colosenses 3:24 sabiendo que del Señor recibiréis la recompensa de la herencia,

Porque a Cristo el Señor servís.

Como cristianos debemos imitar a Cristo y amar a todas las personas sin importar dónde están o qué hacen

Porque al dedicarnos a servir a los demás, es a ¡Cristo el Señor al que servís¡ recordando que la mayor necesidad del ser humano se llama Cristo

El mandato cultural de Dios

Y es de esa única manera en la que podremos cumplir en gran mandato cultural dado a todos los que hemos creído.

Por tanto, necesitamos ser de influencia en el mundo con un testimonio de vida que hable de Jesucristo.

  • ¿Cómo armonizar el mandato cultural con mi vida cotidiana?

1 Corintios 10:31 Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios.

Los cristianos necesitamos crear una mente que No divorcie nuestra vida cotidiana de nuestra vida de piedad,

Es decir que, al momento de actuar o tomar una decisión, no pensemos que Dios es una cosa, que la iglesia es otra y que nuestra vida secular es ajena a ellos

Sino por el contrario, formemos un pensamiento que entienda que todo lo que hacemos es para la gloria de Dios.

Y eso incluye nuestro trabajo, nuestra relación con el vecino, con los hijos, el conyugue, lo que vemos y oímos.

Porque al final de cuentas, nuestro verdadero jefe es Dios, y todo lo que hacemos y cómo lo hacemos debe tener como propósito que el Nombre de Dios sea exaltado.

Conclusión

Salmo 115:1  No a nosotros, oh Jehová, no a nosotros,

Sino a tu nombre da gloria,  Por tu misericordia, por tu verdad.

El mandato cultural es el primer mandamiento que Dios dejo a los hombres, y es tan actual como lo fue en los tiempos de Adán y Eva,

Por tanto, todos nuestros triunfos, nuestros logros académicos, materiales, familiares y de toda índole ¡Solo han de dar la gloria a Dios¡ y no al hombre,

Considerando además a la iglesia, como parte de nuestra vida de fe y de crecimiento espiritual.

Por tanto, multipliquemos la imagen de Dios comenzando en nuestra propia casa, y fructifiquemos hasta llenar la tierra de la gloria de Dios

Porque solamente así podemos sojuzgar todo lo creado, siendo mayordomos fieles y genuinos colaboradores de la obra de Dios

 

[1] Pablo Moena, http//mandatocultural.com