¿Cuál Es El Llamado De Dios? Es importante entender el llamado en la vida cristiana, ya que podría confundirse con el llamado del mundo,

Pues sabemos que en el mundo cada uno de nosotros elige dónde estudiar, dónde quiero trabajar, y somos seleccionados por nuestros méritos, experiencias o recomendaciones,

Pero las cosas son muy distintas cuando se trata del llamado divino a la fe cristiana, ¿Por qué? Porque Dios es soberano en el llamado,

Debemos entender que es Dios el que llama, y llama a quien Él quiere, es Dios quien nos ubica dentro del cuerpo de Cristo y todo lo hace según su Voluntad para nosotros

Y es de esa misma manera como Dios nos da la oportunidad, el privilegio de servirle, instruyéndonos sobre la forma de hacerlo por medio de su Palabra.

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¿Cuál es el llamado de Dios?

Si bien sabemos que el mundo nos llama tomando en cuenta nuestros méritos o llegamos a cada puesto o lugar, gracias a nuestras habilidades y contactos,

Para Dios, nada de lo nuestro cuenta, sino que Dios nos llama tomando Él la iniciativa según su propia Voluntad soberana

Y nos llama cuando cada uno de nosotros somos enemigos de Él, cuando no queremos nada con Dios, y tenemos un corazón necio y endurecido para oír su voz

Pero el llamado de Dios  no solo es para salvación, para rescatarnos del mundo de pecado y librarnos de nuestra propia autodestrucción,

Sino que Dios también nos llama a la santificación, a la adoración por medio del servicio, tanto dentro del templo como fuera de él.

Texto de referencia.

Marcos 1:16-20 Andando junto al mar de Galilea, vio a Simón y a Andrés su hermano, que echaban la red en el mar; porque eran pescadores.

Y les dijo Jesús: Venid en pos de mí, y haré que seáis pescadores de hombres.

Y dejando luego sus redes, le siguieron.

Pasando de allí un poco más adelante, vio a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan su hermano, también ellos en la barca, que remendaban las redes.

Y luego los llamó; y dejando a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros, le siguieron.

Es increíble leer este texto y contemplar la obediencia ¡Inmediata¡ de estos hombres al llamado del Señor

Vemos como Jesús solamente dice “Venid en pos de mí”  y ellos, dejándolo todo, inmediatamente le siguieron

Entonces, ¿Qué significa el llamado de Jesús “venid en pos de mí”? Significa seguirle, ir detrás de Cristo, tomarle a Él como nuestra prioridad

Y no podemos dejar de observar, que siempre es Cristo quien toma la iniciativa en el llamado, y que Él es soberano en la decisión de, a quién llamar

  1. ¿Cuál es el llamado de Dios?

Debemos darnos cuenta que el llamado de Dios tiene dos características: es eficaz, que quiere decir, que nadie puede resistirse

Pero además ese llamado que Dios nos hace, es un llamado interior, impacta nuestra voluntad y produce un nuevo nacimiento ¡Sobrenatural¡

  • ¿Cuál es el llamado de Dios? Es un llamado irresistible

¿Quiénes van a seguir a Cristo? Solamente aquellos a quienes Él llama, y ¿Quién va a dedicarse a la obra de Cristo? Solamente los que Cristo llama,

Marcos 1:18 Y dejando luego sus redes, le siguieron.

El llamado de Dios es eficaz ¡Nadie puede resistirse¡ es por ello que Pedro y Andrés, inmediatamente dejaron sus redes y siguieron a Cristo

Y sabemos que en estos dos hermanos no hay capacidad especial, mérito alguno para que hayan sido elegidos por Dios,

Sino que es una obra de gracia soberana la que da el privilegio de ser un llamado de Dios para su obra y su reino.

Pero ellos pudieron decir “estamos ocupados, estamos trabajando, no nos conviene dejar nuestra ocupación, otro día iremos”

Sin embargo no fue así, sino que “Dejaron luego sus redes y ¡Le siguieron¡” esto significa que cuando Dios nos llama, no vale razonamiento humano alguno

Sino que inmediatamente oímos a voz de Dios, nuestro corazón es dispuesto en obediencia y sometemos nuestra voluntad a la Voluntad santa de Dios.

  • ¿Cuál es el llamado de Dios? Es un llamado interno

El llamado de Dios es un llamado interno porque transforma el corazón de manera tal que la voluntad personal es inclinada hacer la Voluntad de Dios

¿Cómo sucede eso? El Espíritu Santo obra un nuevo nacimiento, da al seguidor de Cristo, un corazón nuevo,

¿Para qué necesitamos un nuevo corazón? Para ser sensibles a la Palabra de Dios, para poder oír y obedecer esa Palabra

De manera que podemos tomar los deseos santos de Dios, vencer todo impedimento del mundo o de nuestra propia humanidad, y seguir a Cristo

Marcos 1:19-20 Pasando de allí un poco más adelante, vio a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan su hermano,

También ellos en la barca, que remendaban las redes.

Y luego los llamó; y dejando a su padre Zebedeo en la barca con los jornaleros, le siguieron.

¿Qué busca el llamado de Dios? busca transformar nuestra mente y corazón de manera tal que le podamos obedecer, que podamos amar lo que Dios ama

Entonces, el llamado eficaz está relacionado con el poder de Dios para regenerar al pecador de su muerte espiritual y darle vida por medio de la fe en Jesucristo.

Por tanto, el llamado de Dios, es un llamado interno, es obrado por gracia divina y es irresistible, ¡No nos podemos negar a seguir a Cristo¡

  1. ¿Cuál es el llamado de Dios? Es un llamado al servicio

El llamado eficaz de Dios es un llamado interior que produce los efectos deseados porque es fruto de la obra sobrenatural e inmediata del Espíritu Santo, en el corazón del nuevo creyente.

¿Qué hace el Espíritu Santo en el corazón del que cree? Efectúa u obra el cambio interior en la predisposición, la inclinación, y el deseo del alma de la persona.

¿Por qué es necesaria esa obra sobrenatural de Dios? Porque ninguna persona siente la inclinación natural de venir a Dios antes de recibir el llamado eficaz e interior.

Porque todos los hombres y mujeres sin Dios, solamente están inclinados al pecado, a la perversidad de la mente, a la necedad del corazón

La predicación del Evangelio en tiempos de crisis

De modo que es imposible que la persona, por iniciativa propia, busque a Dios y sienta deleite en la Palabra de Dios y mucho menos, que la pueda obedecer

Por tanto, se hace necesaria e indispensable esa obra sobrenatural del Espíritu Santo, para que todos los que son eficazmente llamados lleguen a Dios y le responden en fe.

Vemos, entonces, que la fe en sí misma es también un regalo de Dios, habiendo sido entregada en el llamado eficaz del Espíritu Santo.

Por tanto el llamado de Dios es irresistible, es por gracia, no toma en cuenta nuestros méritos, es interno y es por medio de la fe.

  • ¿Cuál es el llamado de Dios? Es un llamado soberano

Marcos 3:13 Después subió al monte, y llamó a sí a los que él quiso; y vinieron a él.

Para la mente humana puede ser incomprensible, pero la Escritura dice claramente, que Dios llama a quién Él quiere

Y en este sentido, el llamado de Dios es una elección externa, determinada por decreto divino desde antes de la eternidad

Cuando no habíamos hecho ni bien ni mal, cuando ni siquiera habíamos nacido, pero ya habíamos sido elegidos por Dios

Sin embargo, esa elección lleva un propósito santo, no fuimos elegidos solo porque sí, para que seamos salvos y felices de manera egocéntrica

Es decir, no fuimos elegidos para gozar de manera egoísta nuestra propia bendición y atesorarla solo para beneficio propio.

  • Fuimos llamados para llevar fruto.

Juan 15:16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros,

Y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca;

Para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé.

Fuimos elegidos por Dios para ¡Ir y llevar fruto¡ ¿Ir a dónde? Ir a todas las naciones, a todas las partes de la tierra

¿Para qué iremos? Para llevar fruto ¿Cuál fruto? Los frutos dignos de arrepentimiento, los frutos producto de la fe

De manera entonces, que hemos sido elegidos para una gran misión: predicar el Evangelio de salvación

Entonces, nuestra elección conlleva la salvación y ¡El servicio¡ no podemos estar cómodamente sentados gozando de nuestra salvación personal

Sino que  debemos ir en busca de los perdidos, de aquellos que aún no creen y llevar esas buenas nuevas de salvación a muchos.

  • ¿Cuál es el llamado de Dios? Un llamado al servicio a su obra.

Todos los hijos de Dios estamos llamados a servirle según el don que hayamos recibido, entendiendo que a todos, Dios nos ha dado, por lo menos, un don

1 Corintios 12:1    No quiero, hermanos, que ignoréis acerca de los dones espirituales.

¿Qué es un Don Espiritual? Es una capacidad espiritual que Dios ha dado a cada  creyente para ayudar a otros cristianos  a entender y obedecer mejor la Palabra de Dios,

Pero también, esos dones son la herramienta que Dios pone en manos del creyente, para poder extender el reino, para alcanzar a los que aún no han creído

En ese sentido, no podemos ignorar todo lo que Dios nos ha dado, porque la iglesia está equipada para hacer toda su misión, con gozo, pasión y valentía.

  • El llamado de Dios incluye nuestro equipamiento

1 Corintios 12:4-5 Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo.

Y hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo.

La iglesia no opera con la uniformidad, sino con la diversidad de dones que el Señor concede a todos y cada uno de los creyentes,

De modo que se pueda cumplir con las diversas formas de servicio y las diferentes necesidades de la iglesia y la expansión del reino

Sin embargo, siempre ha de ser Dios quién haga posible que cada creyente sirva y Él determinará los efectos de ese servicio

Por tanto, lo nuestro es disponer todo nuestro ser, manos, pies, bocas, al servicio de la obra del Señor, y será Dios quién determine cómo nos ha de usar

Lo importante es, entender que todos somos necesarios y útiles en el reino, y debemos estar contentos y agradecidos, con el don que a Dios le haya placido darnos.

Y no debemos anhelar ser otra cosa distinta de aquella para la cual Dios nos ha llamado, porque eso trae sufrimiento y rivalidad en el cuerpo de Cristo

Entonces, estemos contentos y agradecidos con el lugar donde Dios nos tiene, con la tarea que realizamos y con los logros ministeriales que el Señor nos concede

¿Por qué? Porque a eso hemos sido llamados y porque es allí justamente, donde somos útiles al reino de los cielos, aquí en la tierra.

  1. ¿Cuál es el llamado de Dios? Es un llamado a la santidad.

Marcos 3:14 Y estableció a doce, para que estuviesen con él, y para enviarlos a predicar,

Fuimos llamados para ¡Estar con el Señor¡ esto significa dejar de hacer lo que antes hacíamos y vivir de manera diferente

Pero esa nueva vida de santidad solo es posible si tenemos comunión con Jesucristo, para poder conocerle  y así imitar su carácter santo

Entonces, primero es nuestra comunión con Dios para luego poder llevar una vida de santidad y así poder ser útiles en la obra del Señor, dedicándonos al servicio

Pero la pregunta es ¿Cómo vemos, cómo entendemos esa comunión con Dios? ese tiempo de comunión con el Señor debe ser visto como un tiempo deleitoso

¿Por qué? Porque es el inmenso privilegio de tener comunión, una relación personal con ¡El Dios Creador de los cielos y de la tierra?

No es una comunión con cualquier ser mortal, o con una deidad creada, sino que entramos en comunión con el Dios Todopoderoso, el Eterno e Infinito Dios

Y esta es una valoración que muy escasamente está haciendo el creyente a tal punto que se ha olvidado el mandato de ¡Sed santos porque Yo soy santo¡

1 Pedro 1:15-16 sino, como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera de vivir;

Porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo. (A)

Aunque no podemos olvidar que la santificación es un proceso, es poco a poco que vamos abandonando nuestra vana manera de vivir

Y sin olvidar que la santidad No es una opción, sino un mandato que al obedecerlo no solo trae gloria a Dios, sino también, mucha bendición a nuestra vida.

  • El llamamiento es a la santidad.

Marcos 1:18 Y dejando luego sus redes, le siguieron.

Inmediatamente los discípulos del Señor, dejaron todo cuánto hacían y “le siguieron” lo que significa ¡Separación¡

Porque seguir a Jesús no solo es una respuesta corporal, sino que implica que salieron a Él, que los discípulos fueron apartados de entre la multitud,

¿Cuál es el llamado de Dios?

¿Para qué? Para que estuviesen siempre con el Señor, y esto, no como una obligación, sino con disfrute, con gozo y deleite

Y como consecuencia de esa comunión, cada hombre y mujer que selecciona el Señor, es llamado a servirle, a dedicarse a la obra para la que han sido llamados.

Conclusión

¿Cuál es el llamado de Dios? Sin lugar a dudas, hemos sido llamados a salvación, santidad y servicio

Pero cada una de esas áreas en la vida del creyente, está determinada por Dios, pues es Él quien nos elige para salvación

Y también es Dios quien nos llama, nos manda a una vida de santidad, apartándonos solo para Él, renovando nuestra manera de vivir

Pero también, es Dios mismo quien nos llama y nos capacita para el servicio de su obra, dándonos la maravillosa misión de la proclamación del Evangelio