Paraos, Mirad Y Preguntad Por Las Sendas Antiguas

Paraos, Mirad Y Preguntad Por Las Sendas Antiguas, Jer.6:16. Este es un llamado imperativo de Dios para su iglesia, sobre todo en nuestros tiempos.

Debemos preguntarnos qué nos quiere decir Dios al permitir las crisis, y no solo a nuestra vida, de manera individual

Sino también, cuando Dios permite las crisis mundiales, como la que vivimos hoy por medio de esta pandemia del COVID 19,

Debemos preguntarnos ¿Cuál es el llamado de Dios al permitir que la iglesia viva esta situación?

Y para poder responder, reflexionemos en cómo ha sido nuestro testimonio cristiano antes del inicio de esta crisis, y qué espera Dios de nosotros:

¿Un cambio? ¿Arrepentimiento? ¿Saldremos de esto purificados o saldremos espiritualmente peor de lo que nos encontrábamos?

Para encontrar una respuesta bíblica, nos basaremos en Jeremías 16 y trataremos de conocer lo que Dios está hablando a nuestra generación.

Si usted desea escuchar esta enseñanza, por favor visite https://youtu.be/qyXkYa-Roj4

Pero si desea profundizar un poco más sobre el llamado de Dios a la iglesia, por favor visite ¿Por Qué Hemos Sido Llamados de Dios?

Paraos, mirad y preguntad por las sendas antiguas

Quiero comenzar esta enseñanza situándonos en el contexto presente que vivimos todos los países en el mundo, que a causa de la pandemia, toda actividad se detuvo,

Y llama mucho la atención, que las iglesias también cerraron sus puertas, y ya casi seis meses de eso,

Ante esta nueva forma de vida, es de mucha importancia pasar del  análisis histórico de la situación a un análisis teológico,

Y no quedarnos únicamente con explicar el origen y evolución de esta pandemia, sino preguntarnos ¿Qué es lo que Dios nos está diciendo?

¿Cuál es el llamado de Dios al permitir que la iglesia viva esta situación? ¿Qué espera Dios de nosotros?  ¿Un cambio? ¿Arrepentimiento?

Texto de referencia.

Jeremías 6:16  Así dijo Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino,

Y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma.^(C) Mas dijeron: No andaremos”

Jeremías sabía que la reforma superficial no bastaba, que el corazón mismo del hombre tenía que cambiar,

Porque en esos tiempos, así como en los nuestros, la Palabra de Dios era menospreciada y aborrecida por él pueblo.

Y el arrepentimiento, se convirtió en uno de los grandes clamores de la predicación de Jeremías.

Donde la idolatría tenía que ser sustituida por la religión revelada, había que reconocer a Dios como el Dios del Pacto.

Porque muy pronto, Dios castigaría a Judá e Israel por sus pecados sexuales, y porque el pueblo ya no guardaba el día de reposo

Justamente lo que sucede hoy al pueblo cristiano, que ha menospreciado el día del Señor, y utilizan el domingo para festejar al mundo, y no al Dios de su salvación.

• Paraos, mirad y preguntad:

La biblia usa en este texto, la metáfora de un peregrino que se ha perdido, que ha extraviado la senda,

Y que se encuentra entre dos opciones: el camino ancho y el camino angosto, por lo que la Escritura manda lo siguiente:

Paraos:

Es decir, detenernos, hacer un alto y adoptar una posición, que nos permita ubicarnos: dónde estamos y hacia dónde queremos ir.

Caminos:

Es una expresión que representa la «forma acostumbrada de conducirse y comportarse en la vida»

Así que “pararse en los caminos” se refiere a detenernos para reflexionar sobre nuestra relación con Dios y con el prójimo.

Y vale preguntarnos ¿Cómo esta nuestra comunión con el Señor? ¿Cómo estamos viviendo la fe cristiana?

Mirad:

Este es un llamado, no solo a detenernos y tratar de percibir, sino, un llamado a examinar, a tomar conciencia de nuestra forma de vida, qué es lo que estamos haciendo y cómo.

Y todas esas acciones de hacer un alto y contemplar el camino de vida que llevamos, Implica volver al punto de partida,

Es un llamado de Dios, para volver a la comunión con Él, volver al propósito por el cual fuimos creados “dar gloria a Dios”,

• ¿Cómo vamos a lograrlo?

Somos mandados a preguntar por las sendas antiguas, por ese camino que lleva a Dios y que hemos extraviado.

Preguntad:

Esta es una acción que a menudo se usa para pedir la dirección o consejo de Dios.

Sendas antiguas:

Son las Escrituras, la Biblia, porque toda ella da testimonio de Cristo,

Así que estamos ante un llamado a volver a la Biblia, interpretada en su contexto; a volver a la verdad infalible de Dios, porque sólo en ella hay libertad y poder santificador,

Porque solo en la Biblia encontramos revelada la voluntad de Dios para su pueblo, y no correr el peligro de estar escuchando doctrinas humanistas, mensajes de hombres,

Por tanto, necesitamos volver al Cristo de las Escrituras, a un mensaje que glorifique a Dios y que haga más santo al creyente.

• ¿Qué vamos a preguntar?

Preguntaremos por el buen camino, y el Buen camino es Cristo, reconociendo que en la vida cristiana solo hay un camino, una meta y un propósito

Para el creyente, el único camino es Cristo; la meta de nuestra vida es la santificación progresiva, y nuestro propósito es dar la gloria a Dios

Juan 14:6  Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

Si nos salimos de las Escrituras, perdemos de vista a Cristo, y si no conocemos las Escrituras tampoco conocemos a Cristo y su voluntad para nuestra vida.

Todo lo que es muy triste, porque solo Cristo es el camino al Padre, solo Él es la Verdad que nos hace libres del pecado, y sólo en Él se encuentra la vida nueva y eterna.

• ¿Qué debemos de hacer?

Debemos andar en ese camino que es Cristo, no apartarnos de Él, sino que seguirlo, y buscar siempre, vivir en obediencia a su Palabra.

Y aunque haya muchas luchas entre la obediencia a la Palabra y las demandas de nuestra humanidad, podemos perseverar

Porque contamos con la ayuda del Espíritu Santo, que nos hace volver al camino y mantenernos en él.

• ¿Qué vamos a encontrar?

Vamos a encontrar  algo que se ha perdido, que se ha extraviado. Encontraremos el verdadero camino que es Cristo, y Él nos dará descanso a nuestras almas,

Mateo 11:28  Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.

Encontraremos descanso en Cristo y en su Palabra, porque encontraremos la guía, la luz, la dirección, la sabiduría necesaria para sobrellevar nuestras cargas,

Y aquellas que son muy pesadas, que amenazan con aplastarnos, tendremos la capacidad y la confianza, de ponerlas en las manos de Cristo, sabiendo que Él hará.

• ¿Cuál fue la respuesta del pueblo?

La respuesta del pueblo de Israel y Judá, fue muy triste, ellos dijeron ¡No lo seguiremos¡ no andaremos ese camino que lleva a Dios.

Y sabemos, que fuera de Dios y su perfecta Voluntad, toda situación se hace más adversa, y viene más dolor y sufrimiento a nuestra vida, a la vida de la iglesia,

Pero aunque esa respuesta es triste, también es gloriosa, porque la necedad nos somete a la prueba, de la cual sale purificado el pueblo de Dios.

1. Paraos, mirad y preguntad por las sendas antiguas ¡Un llamado a corregir¡

Jeremías 6:8  Corrígete, Jerusalén, para que no se aparte mi alma de ti, para que no te convierta en desierto, en tierra inhabitada.

¿Qué significa “corregir”? hace referencia a castigar, si es preciso con golpes, todo aquello que nos aparta del camino de Dios.

Es volver a la instrucción y meditar cómo estamos viviendo, para lo cual, es útil y necesaria la Escritura.

2 Timoteo 3:16  Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,

Necesitamos el consejo divino para poder discernir todo aquello que estamos haciendo mal, todas esas formas de vida que nos apartan de la voluntad de Dios

2. Paraos, mirad y preguntad por las sendas antiguas ¿Cómo aplico este llamado?

El mensaje de Jeremías, no solo es para el tiempo que vivió el profeta, sino también para nuestro tiempo

Así que preguntémonos ¿Qué me ha dicho este mensaje? y ¿Cómo aplico este mensaje en mi vida?

• Huid de la idolatría.

1 Corintios 10:14  Por tanto, amados míos, huid de la idolatría.

Un ídolo es todo aquello que sustituye a Dios; es todo aquello en lo que invertimos nuestro tiempo, nuestros esfuerzos, en lo que ponemos alma, corazón y vida.

De manera que los ídolos toman el lugar de Dios, haciendo que nos alejemos, que perdamos la prioridad y con ello, que perdamos la senda de la vida.

• Huid de la fornicación.

1 Corintios 6:18-19  Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo;

mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca.

¿O ignoráis que vuestro cuerpo es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros,^(C) el cual tenéis de Dios, y que no sois vuestros?

Fornicación, es una palabra que proviene del griego “porneia” y hace referencia a una relación sexual ilícita,

Y metafóricamente, nos habla de la asociación de la idolatría pagana con doctrinas de la fe cristiana, y con la profesada adhesión a ella.[1]

Es decir, que la iglesia se vuelve fornicaria, cuando hace una mezcla de lo santo con lo pagano, cuando introduce al mundo en su liturgia, en su predicación,

Y este es un llamado fuerte para la iglesia de hoy en día, que ha dejado de lado las Escrituras, para predicar mensajes humanistas, motivacionales, egocéntricos,

De manera que somos mandados a huir de toda fornicación y vivir exclusivamente para Dios y su gloria.

• Un llamado a dejar de hacer lo malo.

Isaías 1:16-17  Lavaos y limpiaos; quitad la iniquidad de vuestras obras de delante de mis ojos; dejad de hacer lo malo;

aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano, amparad a la viuda.

Los tiempos de Isaías, como los nuestros, eran tiempos de mucha maldad, mucha injusticia social, mucha corrupción,

De manera que se nos llama a dejar de hacer lo malo y que aprendamos a hacer el bien, que vivamos una santidad práctica,

De ayuda al prójimo, al necesitado, a la viuda y al huérfano; de practicar la justicia y restituir a todo aquel a quien le hemos causado agravio,

Un llamado a quitar toda iniquidad, toda maldad, todo lo que es injusto y que es contrario a la Ley Moral de Dios

Y esta es una santificación práctica que se evidencia en un estilo de vida, que glorifica a Dios y mantiene una armonía con el prójimo.

Isaías 1:18  Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos;

si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana.

Y sólo si nos limpiamos de toda iniquidad, es que podremos ir delante de Dios y ponernos a cuentas, para que nuestro pecado sea limpiado.

• Un llamado a amar y no despreciar la Palabra de Dios.

Jeremías 6:10  ¿A quién hablaré y amonestaré, para que oigan? He aquí que sus oídos son incircuncisos, y no pueden escuchar;

he aquí que la palabra de Jehová les es cosa vergonzosa, no la aman.

Es tan grande la decadencia del hombre, que sus oídos se encuentran tapados, y no pueden escuchar, y mucho menos comprender, la Palabra de Dios

Porque la Palabra de Jehová les es cosa vergonzosa, les ofende, de manera que se evidencia que  No aman la Palabra del Señor y detestan escucharla.

Por tanto, hay un endurecimiento del corazón del pueblo, que comienza con el descuido, continúa con más descuido

Y termina con un descuido total de la predicación de la palabra de Dios y el diablo se siente muy feliz cuando consigue que alguien deje de escuchar la predicación de la palabra.

Es así como, Jeremías, al igual que muchos pastores de nuestro tiempo, tenía un mensaje que dar, pero no había nadie que lo escuchara.[2]

Juan 14:15  Si me amáis, guardad mis mandamientos.

Y si no podemos amar la Palabra de Dios, tampoco podemos obedecerla, y sin obediencia, no podemos decir que amamos al Señor,

• Un llamado a no amar al mundo y sus deseos.

Jeremías 6:13-15  Porque desde el más chico de ellos hasta el más grande, cada uno sigue la avaricia;

y desde el profeta hasta el sacerdote, todos son engañadores. Y curan la herida de mi pueblo con liviandad, diciendo: Paz, paz; y no hay paz.^(A)

¿Se han avergonzado de haber hecho abominación? Ciertamente no se han avergonzado, ni aun saben tener vergüenza;

por tanto, caerán entre los que caigan; cuando los castigue caerán, dice Jehová.

La gente, la nación entera, se había entregado a la avaricia y a la codicia, y con ello, se habían inclinado ante el más grande de todos los ídolos: el amor al dinero

Y el amor por este mundo, la pasión por las cosas que ofrece esta vida, se ha arraigado profundamente en todo corazón humano.

De manera que estamos frente a un alma insaciable, que siempre quiere más y más, nada es suficiente.

Y donde el sacerdote y el profeta, se vuelven engañadores, y olvidan predicar a Cristo, hacer el llamado a la santidad y poner a Dios en primer lugar

1 Timoteo 6:10  porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe,

y fueron traspasados de muchos dolores.”

¡Nada diferente a nuestros tiempos¡ Cuánta validez tiene la demanda de esta Palabra para nuestra iglesia actual.

• Un llamado a dejar la religión superficial.

Jeremías 6:20  ¿Para qué a mí este incienso de Sabá, y la buena caña olorosa de tierra lejana?

Vuestros holocaustos no son aceptables, ni vuestros sacrificios me agradan.

No basta con la apariencia de santo, ni con usar un lenguaje cristiano, ni con apariencia de piedad, ¡No se trata de una apariencia externa¡

Sino que Dios demanda una vida consagrada, una vida de obediencia a sus  mandamientos, y para poder lograrlo, tenemos la ayuda del Espíritu Santo en nosotros.

De manera que la verdadera religión, es aquella que por medio de la predicación genuina de la Palabra de Dios, va transformando nuestro carácter, a semejanza de Cristo.

• Un llamado a escuchar a los Atalayas.

Jeremías 6:17  Puse también sobre vosotros atalayas, que dijesen: Escuchad al sonido de la trompeta.

Y dijeron ellos: No escucharemos.

El Señor puso centinelas, que tenían como misión, emitir una señal de alarma cuando se viera venir el peligro, y el pueblo debía estar atento a ese llamado

De manera que el atalaya tiene como función «vigilar» con el propósito de advertir el peligro de perder la comunión con Dios,

Es el atalaya es que advierte el peligro del pecado que nos esclaviza e impide la adoración al Señor.

Y esos Atalayas eran los Profetas, y hoy en día, son los Pastores que predicamos la palabra de Dios escrita en la Biblia.

Con el propósito que todo el pueblo de Dios sea instruido, se encuentre atento al consejo divino, y se aparte del mal con todo discernimiento.

• Un llamado a guardar el día de reposo.

Jeremías 17:22-23  Ni saquéis carga de vuestras casas en el día de reposo,^[b] ni hagáis trabajo alguno,

sino santificad el día de reposo,^[c] como mandé a vuestros padres.

Pero ellos no oyeron, ni inclinaron su oído, sino endurecieron su cerviz para no oír, ni recibir corrección.

Será que antes de la pandemia y esta larga cuarentena ¿Guardábamos el día de reposo? ¿O el día del Señor era menospreciado, pasado por alto, visto como un día más?

¿Teníamos apartado el día domingo como un día para correr al templo, a dar alabanza a Dios?

Estas son preguntas que debemos responder en nuestro corazón, porque, al reflexionar cómo Dios permitió que los templos se cerraran,

Es una invitación a meditar profundamente, cómo está nuestra comunión con el Señor, cómo está nuestro deleite en la adoración, cómo estamos viviendo la vida cristiana.

Conclusión.

La senda antigua es reconocer que somos imperfectos, y que necesitamos buscar el camino que hemos perdido,

Es la necesidad que Dios more y gobierne a su pueblo, es extirpar toda la falsa sabiduría, en las iglesias humanistas, filosóficas, con falsa religiosidad,

O iglesias centradas en el intelectualismo, la exaltación al hombre, un legalismo que estrecha aún más la puerta y que conduce a idolatría.

Así que “Paraos, mirad y preguntad por las sendas antiguas”  para volver a recibir la Palabra que da vida, que nos confronta, nos cambia y  que nos disciplina.

¿Qué personas o que lugares impiden que yo tenga una buena comunión con Dios? En resumen, preguntemos, respondamos y corrijamos.

Palabras y frases significativas:

Corrígete: yasár; castigar, literalmente (con golpes) o figurativamente (con palabras); de aquí, instruir:- Meditar y corregir,

[1] Diccionario VINE NT, significado de la palabra “fornicación”

[2] Ehlke, R. C. (2000). PREFACIO DEL EDITOR. En L. E. Albrecht, J. C. Jeske, & C. A. Jahn (Eds.), Jeremías, Lamentaciones (pp. i–48). Milwaukee, WI: Editorial Northwestern.