Solo Cristo Es Suficiente Para Nuestra Salvación

¡Solo Cristo Es Suficiente Para Nuestra Salvación¡ Necesitamos conocer las Acciones de Dios Hijo en nuestra salvación.

Y nos podemos preguntar ¿Por qué solo Cristo?, y si nos remontamos a las “Cinco Solas” de la reforma ¿Por qué “Cinco Solas”?

Porque necesitamos dejar cada una de las cinco afirmaciones ¡solas¡, sin agregar nada más, para comprender la obra de Dios en nosotros.

Cuando decimos “Sola Escritura” es ella sola, no poner nada más a la par de su autoridad y suficiencia

Es decir, hay quienes creen en la Escritura pero también creen en la tradición, como norma de autoridad para santificar nuestra vida,

Es por eso que los reformadores tuvieron la necesidad de dejar la expresión “Sola Escritura” y “Toda Escritura. (2 Timoteo 3:16),

De igual forma, muchos cristianos creen en la gracia pero también asignan valor salvífico a las obras,

Creen en la gloria exclusiva para Dios, pero también le dan gloria al papa, creen en Cristo pero también en la doctrina mariana, tienen fe en todo pero menos en Cristo.

De allí la urgente necesidad, que como creyentes cristiano, entendamos que ¡Solo Cristo¡ basta y es todo suficiente para nuestra salvación.

Si desea profundizar más sobre la práctica de “confesar a Cristo”, puede visitar Confesar A Cristo ¿Qué Significa?

¡Solo Cristo es suficiente para nuestra salvación¡

Como creyentes debemos tener mucho cuidado en no vivir en un sincretismo, creyendo en tantas cosas que nos impiden llegar a la Verdad de Dios.

Para ello, debemos entender en qué consisten las acciones del Dios Hijo para nuestra salvación, y poder así desechar tanta falsedad doctrinal

Porque, como dijo el mismo Señor Jesús, solamente la Verdad de Dios, nos hará completamente libres del pecado, del mundo y del engaño de Satanás.

1. Solo Cristo nos hace aceptos delante del Padre

Efesios 1:6  para alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado,

La Escritura nos enseña que todo empieza con Dios y termina en Dios, es así como, todo proviene de Dios y todo es para “alabanza de su gloria”

Esto significa, que nuestra salvación comienza en la determinación libre y soberana del Padre, que nos elige para salvación,

Pero esa salvación es obrada en el Hijo, en Jesucristo, es por eso que la Escritura nos dice que “nos hizo aceptos en el Amado”

Por lo que, cada uno de los que hemos creído, hemos encontrado gracia delante de Dios, pero en la obra redentora de Cristo para su iglesia.

Y es en ese sacrificio indescriptible del Hijo de Dios, que cada uno de nosotros hemos sido favorecidos con la justicia de Cristo

Por tanto, Dios Padre nos favoreció, concediéndonos gracia por la acción de Cristo en la cruz del calvario.

• Cristo el Hijo Amado del Padre:

Esta es una hermosa expresión del Padre hacia el Hijo, y que la hace expresa en dos ocasiones a los largo del Nuevo Testamento:

En el bautismo.

Marcos 1:11  Y vino una voz de los cielos que decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia.

Dios Padre, expresamente dice “el Hijo mío, el Amado” y lo hace en el momento justo que el Señor Jesús está por iniciar su oficio sacerdotal,

En ese momento cuando Jesucristo se identifica como el “mediador” entre Dios y los hombres, un momento tan importante, que se evidencia la acción del Dios Trino

Y allí encontramos la voz del Padre, afirmando que Jesucristo es “el Hijo amado”, vemos al Hijo de Dios, disponiéndose para iniciar el plan de redención ideado en la eternidad,

Y vemos descender al Espíritu Santo confirmando el ministerio del Señor, confirmando que el Padre está entregando lo más amado que tiene: al Hijo.

En la transfiguración.

Mateo 17:5  Mientras él aún hablaba, una nube de luz los cubrió; y he aquí una voz desde la nube, que decía:

Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia;^(B) a él oíd.

Aquí el Padre nos recuerda una vez más, qué es lo que Él entregó por amor a su pueblo: ¡Su Hijo amado!

Y solo en Él tiene complacencia porque solo Cristo es el único capaz de llevar a cabo el plan de redención, y por eso dice “a Él oíd”

2. ¿Por qué ama el Padre al Hijo?

Juan 8:29  Porque el que me envió, conmigo está; no me ha dejado solo el Padre, porque yo hago siempre lo que le agrada.

El Padre, en su propia iniciativa, en el consejo de su propia voluntad, decide enviar al Hijo, para redimir a su pueblo del pecado.

Y en esa decisión, el Padre puso sobre su Amado Hijo el pecado de nosotros, y el Hijo con agrado, cumple la misión que el Padre le da,

Es por eso que Jesucristo es el Hijo amado del Padre, porque siempre hace lo que le agrada al Padre, y lo hace con agrado porque entre ellos hay una unidad de propósito.

Isaías 53:6  Todos nosotros nos descarriamos como ovejas,^(E) cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.

Aquí encontramos la iniciativa divina del Padre, que transfirió el castigo que merecíamos nosotros, a un sustituto: el Hijo Amado.

Y así se cargo sobre Jesucristo una carga que era nuestra, y que nos destruía y nos conducía a muerte física y eterna.

Esa es la carga del pecado, que nos mantenía esclavos y sin esperanza, de la que era imposible liberarnos por nuestra propia cuenta,

¡Solo Cristo¡ podía hacer esa maravillosa tarea redentora, para hombres y mujeres muertos en sus delitos y pecados, incapacitados para llegar al Padre.

• Porque el Hijo cumple la justicia del Padre:

Romanos 8:32  El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros,

¿Cómo no nos dará también con él todas las cosas?

Dios Padre, completamente Santo, en su propia justicia entrego a su Hijo para salvación nuestra, y lo envió a muerte

Lo que demuestra que el Padre es completamente justo, no pasa por alto el pecado, sino que lo castiga, poniendo nuestro pecado sobre su propio Hijo

Reconociendo que la paga del pecado es muerte, y si nosotros no hemos de morir eternamente, alguien lo hizo por nosotros, y ese es Jesucristo

Que con su obediencia perfecta a la ley de Dios y en su obediencia pasiva a todos los sufrimientos que significaba liberar a su pueblo, Cristo satisfizo la justicia del Padre.

Y si el Padre ya dio lo más grande que tiene, que es su Hijo Amado ¿Cómo no nos dará también con Él todas las cosas?

Pero ¿Qué son “Todas las cosas”? Si el Padre ya entregó a su Hijo por amor a nosotros, también nos dará todo lo necesario para nuestra vida, tanto espiritual como material.

3. ¿Qué hace Cristo por nosotros?

Nos podemos preguntar ¿Qué hace Cristo por nosotros? Y muchas veces nos quedamos pensando en todas nuestras necesidades materiales insatisfechas,

Y olvidamos que el problema más grande que tiene todo hombre y mujer, se llama pecado, que no solo nos destruye y mata,

Sino también, ese pecado nos convierte en enemigos de Dios, nos mantiene bajo la Ira divina y destituidos de su gloria.

De allí, que cada uno de nosotros somos necesitados de la obra de Cristo, necesitados de su bendición espiritual.

• Solo Cristo Justifica.

Romanos 8:33  ¿Quién acusará a los escogidos de Dios? Dios es el que justifica.

Solo Cristo nos da la seguridad espiritual que tanto necesitamos, esa seguridad de sabernos libres de culpa, libres de toda acusación,

De manera, que gracias a la justicia de Cristo, que en su obediencia perfecta cumplió con todas las demandas de la Ley,

Y que esa justicia de Cristo nos es aplicada a nosotros por la fe en Él, ahora nosotros somos justificados, somos declarados justos, no culpables, y por tanto No condenados.

Entonces, la obra perfecta y justa de Cristo, nos cubre delante del Padre, y ahora tenemos la seguridad de ser aceptos por el Padre, somos vistos y escuchados por Él.

Y es así como Cristo con su vida de obediencia, su muerte y resurrección, logro dos cosas maravillosas:

La exaltación de su Nombre, por sobre todo nombre, y la justificación de su pueblo, porque Él cumplió a la perfección la Ley y nos transfirió Su justicia

• Solo en Cristo No hay acusación.

Romanos 8:34  ¿Quién es el que condenará? Cristo es el que murió; más aun, el que también resucitó,

el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros.

Hemos dicho que Cristo, con su obediencia perfecta nos justifica, nos transfiere su justicia, de manera que ya no hay acusación sobre los hijos de Dios,

Y ya no hay quien nos señale, porque Cristo fue el que pago toda nuestra deuda, porque con su vida de obediencia, sin pecado, cumple toda la Ley,

Pero con la resurrección de Cristo, demuestra su santidad y la satisfacción de la justicia del Padre,

Y ahora está sentado a la diestra del Padre, gobernando sobre su iglesia, intercediendo por nosotros, justificándonos con su justicia, delante del Padre.

• Solo Cristo nos da seguridad.

Romanos 8:35-39  ¿Quién nos separará del amor de Cristo? ¿Tribulación, o angustia, o persecución, o hambre, o desnudez, o peligro, o espada?

…ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.

El amor de Dios Padre hacia nosotros los creyentes, es un amor eterno, no está sujeto a las circunstancias que vivamos,

Lo que demuestra que Dios nos ama no porque lo merezcamos, y que ese amor tampoco está circunscrito a un sentimiento,

Sino que Cristo determinó amarnos desde antes de la fundación del mundo, cuando ni siquiera habíamos nacido, no habíamos hecho ni bien ni mal,

De manera entonces, que el amor de Dios hacia sus elegidos, no depende de nosotros, y esto nos da la garantía de que siempre estaremos en el corazón de Dios,

Pero también, debemos estar claros, que este amor incondicional de Dios no es una licencia para pecar,

Sino que en Cristo, hay una demanda de crecer en la obediencia a la Palabra, de santificar nuestro pensamiento y dar testimonio de una vida nueva y transformada,

• Solo en Cristo tenemos entrada al trono de la gracia.

Hebreos 4:16  Acerquémonos, pues, confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro.

No existe otro camino al Padre ¡solo Cristo¡ en Él encontramos la justicia necesaria para poder presentarnos delante del trono de gracia,

Y ¿Para qué necesitamos entrar a ese trono de gracia? ¡Para alcanzar misericordia¡ y en lugar de recibir el castigo que merecemos por nuestras transgresiones,

Podamos encontrar la gracia preciosa, que pasa por alto nuestra ofensa, nos perdona, nos limpia y nos restaura,

Pero no solo eso, también encontramos esa gracia preciosa que nos socorre, que nos auxilia, que nos consuela en las diversas tribulaciones de la vida.

Y todo ello, lo podemos tener, solamente en Cristo, que es el camino, la Verdad y la vida para todos los que hemos creído.

• En Cristo tenemos redención por su sangre.

Efesios 1:7  en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados^(B) según las riquezas de su gracia,

Tener redención significa tener liberación ¿Liberación de qué? ¡Del pecado¡ ¿Y cómo somos liberados? Mediante el pago de un precio o rescate.

Es decir, somos liberados de la culpa del pecado mediante la sangre de Cristo derramada en la cruz; Él nos liberta, rompe nuestras cadenas.

Génesis 3:21  Y Jehová Dios hizo al hombre y a su mujer túnicas de pieles, y los vistió.

Desde los inicios del hombre, cuando por su desobediencia entro el pecado a la humanidad, el sacrificio libertador de Cristo fue anunciado

Porque, desde el momento que Dios viste al hombre y a la mujer con pieles, ya se habla de un derramamiento de sangre, necesario para cubrir nuestro pecado.

Y desde allí entendemos que solamente un sacrificio de sangre puede redimirnos, y ese sacrificio eficaz lo hizo el cordero de Dios, Jesucristo,

Filipenses 2:8-9  y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz.

Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre,

Y esa obra redentora de Cristo, debe generar en nosotros, un cántico nuevo, porque gracias a Él, somos hechos hijos de Dios, reyes y sacerdotes para nuestro Dios

Apocalipsis 5:9-10  y cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos;

porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación;

y nos has hecho para nuestro Dios reyes y sacerdotes,^(G) y reinaremos sobre la tierra.

• Solo Cristo provee perdón de pecados.

Efesios 1:7  en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados^(B) según las riquezas de su gracia,

Ese perdón de pecados se hace efectivo en la cruz del calvario, cuando Cristo exclama “!Consumado es¡” que no es una expresión de lástima, sino un grito de victoria

Juan 19:30  Cuando Jesús hubo tomado el vinagre, dijo: Consumado es. Y habiendo inclinado la cabeza, entregó el espíritu.

Esa expresión “Consumado es” significa que Cristo cumplió con su cometido, y le dice al Padre ¡He pagado el precio¡ y queda satisfecha la justicia divina.

De manera que con el sacrificio del Hijo, quedan completamente perdonados nuestros pecados, y ya no hay acusación sobre los que hemos creído.

4. ¿Qué trae Cristo a su iglesia?

La vida, muerte y resurrección de Cristo nos dan a conocer “el misterio de la voluntad de Dios”, es decir, revelan el desarrollo del plan de redención.

Efesios 1:8  que hizo sobreabundar para con nosotros en toda sabiduría e inteligencia,

Con estas palabras, el apóstol Pablo nos afirma que Cristo trae para su iglesia, el conocimiento, la sabiduría

Tanto el conocimiento intelectual que aclara la mente, pues con el pecado el entendimiento del hombre quedó entenebrecido,

Así como, la sabiduría, que es el conocimiento práctico que nos permite resolver los problemas cotidianos de la vida,

Por lo que podemos decir con plena convicción, que Cristo nos trae, a todos los creyentes, la solución para nuestros problemas, tanto de esta vida como de la eternidad.

Ahora, con la sabiduría de Cristo, ya entendemos la Palabra de Dios, y podemos ver que en Cristo está la solución al gran problema del hombre: ¡El pecado¡

Porque el pecado no es un problema con el diablo, sino que es un gran problema que tenemos con Dios, nuestro Creador

Ahora, ya tenemos la sabiduría y el entendimiento para luchar contra el pecado, y para dar solución a las diferentes adversidades que nos hace enfrentar la tentación.

• Solo Cristo nos da a conocer la Voluntad del Padre

Efesios 1:9  dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí mismo,

En Cristo podemos conocer el plan divino, ese plan de redención que Dios mismo se propuso llevar a cabo, desde la eternidad.

Génesis 3:15  Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar.

Desde la caída del hombre, Dios ya había establecido la salvación y la forma en que se llevaría a cabo ese plan de redención

Y es así como en Génesis 3:15 encontramos la Promesa escatológica: Llegaría el día en el que vendría uno que heriría de muerte a la serpiente: ¡Cristo¡

Pero este proto Evangelio, no fue comprendido claramente por Adán y Eva, sino que ha sido revelado progresivamente en el tiempo de Dios,

Y aún así, Adán puso su esperanza en esa promesa redentora del Padre, y fue esa misma promesa la que sostuvo a todos los antiguos hombres de fe de la Biblia,

Donde esperaban el día glorioso en que vendría el Cristo, y así como esta primera venida de Cristo sostuvo a los antiguos, a nosotros nos sostiene en esperanza, la segunda venida

Pero la pregunta es ¿Esperamos la segunda venida de Cristo con alegría? ¿Esperamos esa segunda venida, en una vida de obediencia y santidad?

• Solo Cristo trae la restauración de todas las cosas:

Efesios 1:10  de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos,

 así las que están en los cielos, como las que están en la tierra.

Cristo viene a ganar todo lo que perdió el primer Adán. ¿Qué se perdió con el primer Adán? Por la desobediencia de Adán, perdimos la vida, porque con su pecado, entró la muerte al mundo,

Además, con el pecado el hombre entró en enemistad con Dios, ahora el hombre ¡Se esconde de Dios¡ Y la relación vertical Dios-hombre queda rota

También el pecado de Adán trae consigo una pérdida de identidad, ahora el hombre siente vergüenza por su desnudez.

Y lo lleva a perder la relación con el prójimo “esta mujer que me diste…” Y con la creación, que ahora produce “cardos y espinos”

Pero Cristo unió en su persona los dos bandos en disputa: Dios y el hombre, y dio satisfacción por el mal que causó la separación.

Es decir, Cristo se puso en medio de Dios y el hombre para mediar con su obediencia y justicia perfecta, la reconciliación del hombre pecador con el Padre

Cristo obra la reconciliación con Dios, nos trae la paz y gana la vida eterna al satisfacer las demandas de justicia del Padre

De manera que todo aquello que perdió Adán, Cristo nos lo devuelve, lo restaura, y nos favorece con su preciosa gracia.

Es así como en Cristo ahora podemos amar a Dios, amar a nuestro prójimo, aceptarnos a nosotros mismos y ser buenos mayordomos de la creación

Y ¡Todo lo que el pecado distorsiono, Cristo lo reunió¡  y nos hizo nuevas criaturas, una nueva creación.

• En Cristo tenemos herencia.

Efesios 1:11  En él asimismo tuvimos herencia,

habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad,

Esa hermosa herencia que tenemos en Cristo, es la vida eterna, ese estado de glorificación al que llegaremos cuando nos reunamos con Él para siempre

Ese glorioso tiempo cuando reinaremos con Cristo para toda la eternidad y viviremos en una continua adoración a nuestro Rey y Señor

5. El propósito de nuestra redención: La alabanza del Dios Hijo.

Efesios 1:12  a fin de que seamos para alabanza de su gloria, nosotros los que primeramente esperábamos en Cristo.

Todo lo que el Padre hace por medio de su Hijo y la obra del Espíritu Santo, solo es para gloria de Dios,

Es decir, que toda esa obra de salvación que Dios realiza en nosotros, debe llevarnos a alabarle por su grandeza, por su amor, su misericordia y su gracia, ¡Porque Él es Dios¡

De manera que podamos comprender, que es Dios Trino quien inicia la obra de redención en nosotros, su iglesia, y es para gloria única de Él.

Conclusión.

Cristo es todo suficiente para nuestra salvación, tanto pasada, como presente y futura, ¡Toda está en las manos de Dios¡

En el pasado: Dios Padre nos escogió y predestinó desde antes de la fundación del mundo, para que fuésemos salvos, apartados para Él.

Y en el presente, nuestra salvación está en Cristo, en Su sacrificio en la cruz, que nos redimió de la esclavitud del pecado,

Porque es en Cristo que somos perdonados, restaurados y reconciliados con Dios, dándonos  a conocer el misterio de la redención.

Y en el futuro tenemos la seguridad de nuestra salvación porque en Cristo hemos de recibir lo que Dios nos ha prometido en su gracia.

Por tanto, ni Yo ni Usted hemos hecho nada para nuestra salvación, sino que ¡Cristo vino a rescatar lo que se había perdido¡

Mateo 18:11  Porque el Hijo del Hombre ha venido para salvar lo que se había perdido.

Palabras y frases significativas:

Aceptos: jaritóo de G5485; otorgar gracia, i.e. investir con honor especial:- hacer acepto, muy favorecida.

Consumado: Tetelestai, teléo,  terminar, i.e. completar, ejecutar, concluir, descargar (una deuda):- pagar, satisfacer, terminar, acabar, consumar, cumplimiento, cumplir.

Beneplácito: eudokía; satisfacción, i.e. (subj.) deleite, u (objetivamente) amabilidad, deseo, propósito:- voluntad, afecto, agradar, anhelo, beneplácito, buen tiempo.